César Castellanos, Juan Bolívar Díaz y Luis Vergés durante su participación en el Almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio.
Santo Domingo.-En la República Dominicana se estima que se reciben unas 70 mil denuncias de violencia por año y entre las principales está la intrafamiliar, de género y sexual, de acuerdo a las explicaciones dadas por los expertos en la conducta humana.
Luis Vergés, terapeuta familiar, citó que a esa estimación hay que agregarle que por cada denuncia “hay diez” que no se hacen.
Explicó que el problema de la violencia no se ve como responsabilidad de un actor social ni científico, ya que todas las ciencias se están articulando, porque es un problema que tiene una base biopsicosocial donde el abordaje tiene que ser integral, no puede haber una forma reduccionista.
Dijo que entre los actores de la violencia están: el agresor, que es quien la perpetra; una víctima, quien recibe el daño, y una población que está como observadora.
“En un seguimiento que hemos venido dando, apenas un 30 % de estos observadores interviene para evitar la violencia. En alguna medida hay que levantar todavía más la conciencia ciudadana para interrumpir esa fase que lleva a la resolución final, que puede ser un feminicidio”, expuso el también director del Centro de Intervención Conductual para Hombres de la Fiscalía del Distrito Nacional.
Precisó que a los casos de los feminicidios no se llega de la noche a la mañana.
El terapeuta indicó que hicieron una investigación en centros penitenciarios, donde directamente conversaron con los internos, y para su sorpresa el promedio, desde la primera vez que generaron violencia, es decir, en contra de estas mujeres que asesinaron, fue de unos seis años.
“Estamos hablando de unos seis años recibiendo violencia antes de que ocurriera el desenlace final y en ese proceso, en algunos casos, hubo denuncias, en la mayoría de los casos no”, sostuvo.
Vergés relató que el centro que dirige realizó otro estudio, en este caso con personas que no cometieron feminicidio, “resulta que la mayor parte de esa población, en 17 mil casos intervenidos hasta la fecha, el mayor porcentaje comienza la violencia en el primer año de la relación”.
Los estudios sobre este tema indican que mientras más temprano comienza la violencia en una relación peor es el pronóstico.
“Habría que ver el nivel de conciencia que tiene la mujer cuando está siendo violentada, porque muchas veces ella no se reconoce como víctima y ve esto como parte de lo normal en una relación”, señaló.
Cada 15 minutos matan
César Castellanos, psicólogo y experto en neurociencia, coincide con Vergés, y agregó que la violencia es un fenómeno con múltiples aristas y que se está asumiendo en una sociedad que está despegando desde el punto de vista del desarrollo y crecimiento, lo que contribuye al incremento de este fenómeno.
Castellanos resaltó que en América Latina y el Caribe cada 15 minutos asesinan una persona y es la región que tiene mayores niveles violentos, de acuerdo a los datos de la Organización Mundial de la Salud y el Banco Mundial.
“De las 50 ciudades más violentas en el mundo, 42 pertenecen a la región”, dijo.
El psicólogo no termina ahí, sino que agregó que la región tiene apenas el ocho por ciento de la población del mundo, sin embargo, se contabiliza el 37 por ciento de los homicidios, lo que significa que es extremadamente alta, a pesar de que casi no tenemos una elevación poblacional.
Otro aspecto que señaló Castellanos es que ocho de los diez países más violentos del mundo están en esta región, liderados por México, Honduras y Venezuela.
El experto en neurociencia, indica que el cerebro humano es construido por la experiencia que vive antes de nacer y de hecho la Organización Mundial de la Salud recomienda trabajar desde el embarazo, porque allí se comienza “a gestar un delincuente”.
Detalló que la violencia tiene sus aristas en la economía de un país, así que “solo si esta crece de manera rápida y la desigualdad disminuye, entonces la violencia disminuye, pero si la economía crece y la desigualdad aumenta la violencia se dispara; la relación es con la desigualdad no con la pobreza o la riqueza”.
Apuntó que cuando hay grandes niveles de inequidad más que de desigualdad, entonces hay una diferencia, porque no todos tienen que ser iguales, pero sí tienen las mismas oportunidades. “Cuando hay inequidad tiende a generar violencia en toda la sociedad”.
Más allá de la criminalidad
El psicólogo César Castellanos dijo que el tema de la criminalidad no se puede ver unido, sino por barrio, porque tienen perfiles y soluciones distintas; por ejemplo, se observa una estadística entre el embarazo en adolecentes y el aumento de la delincuencia.
Consideró que por los niveles de deserción de las escuelas, la pobre escolaridad, hay más delincuencia.
“Entre los 20 y 24 años es donde observamos la preocupante tasa en nuestra región, que es de 48 por ciento de cada cien mil habitantes”,