Franklin Puello 
Margarita Cedeño de Fernández
SANTO DOMINGO.-La vicepresidenta Margarita Cedeño de Fernández acaricia seriamente la idea de tener la oportunidad de articular un proyecto presidencial, aunque políticamente no sería el momento para una definición de cara a los acontecimientos que se producirán en el Partido de la Liberación Dominicana, en cuanto al futuro inmediato del presidente Danilo Medina y del expresidente Leonel Fernández.
Favorecida con una amplia simpatía en las recientes encuestas divulgadas en los medios de comunicación, ella entiende que podría constituirse en una opción viable para potabilizar una candidatura que pudiera surgir como consecuencia del agravamiento de la crisis interna que cada día es más visible por las disputas entre las parcelas de Medina y Fernández.
Con un perfil un poco moderado, Cedeño de Fernández mantiene una postura equidistante entre los bandos que amenazan con fragmentar cada vez la estructura interna del PLD: el presidente Medina en caso de decidirse por motorizar una reforma de la Constitución que le habilite para ser el candidato para los comicios de 2020, y el expresidente Fernández con su bandera en defensa de la Carta Magna y en abierto rechazo de una repostulación.
Sin embargo, la vicemandataria podría encontrar obstáculos en su ambición legítima de tener la posibilidad de encabezar la nominación presidencial por el PLD, siendo la más válida que ella no cuenta con la trayectoria política que tienen otros dirigentes de la talla de Reinaldo Pared Pérez, Francisco Domínguez Brito y Temístocles Montás para ser presentada como la salvaguarda en un conflicto insalvable entre Medina y Fernández.
Si bien ella cuenta con una alta valoración en cierto segmento de la población, según los datos recientes de algunas encuestas, ese posicionamiento está eclipsado por el liderazgo que ostentan los dos líderes del PLD y por el aval interno de otras figuras que podrían emerger en caso de una definición que obligue evitar una división en esa organización.
Al margen del machismo, Cedeño de Fernández navega en una situación política e institucional que en los actuales momentos no incentiva a una conciencia plena de la sociedad para que una mujer pueda sentarse en la “silla de alquileres”, independiente de la capacidad que haya exhibido la esposa del exmandatario desde el Despacho de la Primera Dama y del cargo que ostenta en el Palacio Nacional.
Llegará el momento en que Cedeño de Fernández deberá romper la neutralidad que mantiene en la actual ebullición interna del PLD, en virtud de que las circunstancias la obligarán a inclinarse hacia el proyecto presidencial que encabeza Leonel Fernández o decidirse a darle su apoyo al proyecto reeleccionista de Medina.
“Perder perder”
Dentro de la estrategia asumida por Cedeño para ofertarse como opción en el PLD, se estima que ha incurrido en un grave error al advertir que una posible reelección de Medina o una candidatura de Leonel Fernández sería una fórmula “perder perder”, mientras que una propuesta suya sería “ganar ganar”, lo que la aparta en cierto modo del punto de equilibrio en el conflicto, a pesar de que lo prudente sería que ella se inclinara por los intereses de su esposo, el exmandatario.
Inclusive, se considera que ese juicio de valor de la vicepresidenta de la República vendría a “echarle candela” al litoral de Fernández, ya que muchos peledeístas y ciudadanos entienden que ella está en la obligación de darle su apoyo a un proyecto político que encabece el líder del PLD, en virtud de que su cobija le ha ganado espacio político y en las estructuras de la organización, a parte de su compromiso familiar.
El “grave error” vendría porque Cedeño de Fernández debe manejarse con total prudencia para no herir la sensibilidad de las parcelas de Medina y de Fernández, además de que la situación socio-política no es favorable para que una mujer pueda llegar a la Presidencia.
Las claves
—1— Diferencias
El tema de la reforma constitucional es la manzana de la discordia en el PLD.
—2— La defensa
Leonel Fernández y su grupo advierten sobre los riesgos de modificar la Carta Magna.
—3— Comité Político
Existe la expectativa de que ese organismo pueda discutir y aprobar una posible reelección.
