El día 30 de agosto pasado tuvo lugar una reunión orientada al diálogo que promueve el gobierno con la declarada finalidad de impulsar reformas dirigidas a la transformación del Estado.
Al encuentro, realizado en el ámbito del Consejo Económico y Social, en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, asistieron representantes del liderazgo nacional, pero llamó la atención la ausencia en la ceremonia inaugural de lo que se espera que sea una serie de encuentros, del anfitrión principal.
Hoy tiene lugar la segunda cita, esta vez en el Centro de Convenciones del Ministerio de Relaciones Exteriores, y de acuerdo con el portavoz del gobierno, contaremos con la presencia del presidente Luis Abinader.
La iniciativa ha tenido lugar en el Palacio Nacional y nadie más indicado que el presidente Abinader para explicar los alcances y la materia de las transformaciones para las que se propone encontrar el apoyo y/o la participación de actores de primera línea de la vida nacional.
Apenas esbozados algunos aspectos de estas transformaciones, por lo menos uno de ellos, el que se refiere a la Constitución de la República, ha generado reacciones en el plano político, de un lado los que siempre aspiran a una constituyente para refundar el Estado, de otros los que no quieren que la toquen.
Estas jornadas de diálogo pueden llegar a ser interesantes.