La importante inversión que ha volcado el Estado dominicano a la educación pre universitaria hace que se puedan abordar todas las aristas para lograr que las escuelas sean verdaderos instrumentos de formación integral.
La escuela es el escenario ideal para el desarrollo de muchas de las disciplinas deportivas.
Desde la época de la antigua Grecia se vinculaban el saber y el deporte. De ahí el dicho “mente sana en cuerpo sano”.
El deporte en las escuelas se puede convertir en un excelente incentivo para la asistencia de los niños, niñas y adolescentes.
Además, facilita que los deportistas de alta competición no tengan que desertar en el proceso de formación tanto física como escolar.
La tanda extendida también es una modalidad que permite la combinación de la formación física y mental del individuo.
No resulta casual que los países de gran desarrollo deportivo vinculen la escuela a la práctica de las diferentes disciplina.
Estados Unidos, por ejemplo, tiene en las escuelas y universidades el paso previo al profesionalismo o al éxito olímpico.
Así, el atleta que no logra la cúspide en su disciplina, queda con una formación académica que le permite garantizar su futuro.
Les corresponde a los ministerios de Educación y de Deportes estrechar sus lazos con las asociaciones y federaciones de las disciplinas para vincular la práctica del deporte con la escuela.