El virus del dengue ha puesto a varios hospitales en estado de emergencia, debido a la gran cantidad de pacientes afectados. Se habla de más de 25 mil casos en todo el país.

No es un secreto que los mosquitos que transmiten el virus del dengue se reproducen en agua limpia. La campaña del Ministerio de Salud Pública “Cloro unta’o y tanque tapa’o” busca ayudar a las familias dominicanas a prevenir y combatir la propagación del dengue, pero, al mismo tiempo dicho mensaje esconde una dramática situación que pone al descubierto la pobreza de los servicios de suministro de agua potable en el país.

La razón de que en muchos barrios vulnerables –de donde proviene el mayor número de niños con dengue– haya una impresionante cantidad de tanques “tapa’os” se debe a que nunca hay agua potable en los lavamanos, cocinas y baños.

Esa precariedad hace que las familias almacenen agua y, precisamente, por efecto directo allí anidan los mosquitos transmisores, y los niños y adultos terminan contagiados de dengue.

De manera que si el Gobierno proveyera un servicio de calidad de abastecimiento domiciliario del preciado líquido, a través de las autoridades de las instituciones acuíferas, los ciudadanos no tendrían que acumular agua en tinacos y grandes recipientes.

Y por tanto, no tendría sentido seguir con la campaña del “Cloro unta’o y tanque tapa’o”. Darle solución, cuanto antes, a este problema representa un importante paso para que el pueblo dominicano goce de mejor salud.