Nuevamente el presidente Danilo Medina puso la “pelota” sobre la ley de partidos en la cancha del Congreso Nacional.
Al pedir a los legisladores que aprueben con urgencia la ley de partidos durante su alocución con motivo del Día de la Independencia Nacional, el gobernante coloca a estos representantes en un camino conflictivo: acoger el proyecto con las primarias o cerradas.
Todo el mundo sabe el enfrentamiento que prevalece entre los sectores internos de Medina y del expresidente Leonel Fernández sobre la celebración de las primarias, con argumentos sobre violación o no de la Constitución.
Ocurre que la mayoría de miembros que no quiso imponer el presidente Medina en el Comité Político del PLD, donde tiene todo el control interno, ahora se pretende poner en marcha con la representación en la Cámara de Diputados y en el Senado.
La suerte de la ley de partidos vuelve al lugar donde ha dormido el sueño eterno en los últimos 15 años, con diferentes proyectos sometidos por la Junta Central Electoral y algunos sectores políticos, teniendo como punto de choque el caso de las primarias abiertas, el financiamiento de los políticos y la cuota para la mujer a cargos electivos.
El presidente Medina ha mostrado un deseo de que el Congreso Nacional apruebe esa pieza legislativa, que nadie descarta será convertida en una realidad que favorezca a algún sector del PLD.
