
SANTO DOMINGO.-El impacto del cambio climático sobre la salud humana ya no es una hipótesis, sino una realidad visible: temperaturas extremas, contaminación del aire y la propagación de infecciones emergentes configuran un escenario sanitario complejo que afecta especialmente a las poblaciones más vulnerables.
Ayer primero de septiembre inició el mes más caluroso del año y se despidió un agosto muy fogoso, donde el calor ha sido extremadamente sofocante en todo el territorio nacional, con la sensación térmica alcanzando los 46° C en Dajabón, ante este panorama es necesario repensar que la incidencia del cambio climático está transformando de manera profunda las bases del bienestar en la vida contemporánea.
Las variaciones constantes en la temperatura, los fenómenos meteorológicos extremos y las alteraciones de los ecosistemas amplían el espectro de riesgos sanitarios.

Esto no solo intensifica enfermedades conocidas, sino que también abre la puerta a nuevos problemas de salud, cuya magnitud preocupa cada vez más a los expertos en salud pública.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte: “Entre 2030 y 2050, el cambio climático es esperado que cause aproximadamente 250,000 muertes adicionales por año, solo por la desnutrición, malaria, diarrea y el estrés por calor”.
Las poblaciones vulnerables, como los niños, los adultos mayores y las personas en contextos de pobreza, enfrentan desafíos particulares ante este fenómeno global que según la entidad internacional “ya afecta a 3,600 millones de personas que viven en áreas altamente susceptibles al cambio climático”.
Expertos analizan la influencia del cambio climático en la salud, tanto por sus consecuencias directas como a través de la contaminación del aire, que proviene en muchos casos de actividades responsables también de las emisiones de gases de efecto invernadero que agravan el calentamiento global. Los organismos internacionales refuerzan y contextualizan estos hallazgos.
Según la OMS, el cambio climático constituye “una amenaza fundamental para la salud humana”. Establece que las variaciones climáticas causan un aumento en la frecuencia de ciertos fenómenos, como olas de calor, tormentas, inundaciones, sequías e incendios.
Impacto mortal
“Estos riesgos meteorológicos y climáticos afectan a la salud tanto directa como indirectamente, aumentando el riesgo de muerte, enfermedades no transmisibles, la aparición y propagación de enfermedades infecciosas y emergencias sanitarias”, manifiestan desde la organización.
Advierten también que el impacto será más grave en “las mujeres, los niños, las minorías étnicas, las comunidades pobres, las personas migrantes o desplazadas, las personas mayores y las personas con afecciones preexistentes”.
Sabios consejos
— ¿Cómo prevenirlos?
La cirujana dermatóloga Sónica Then Reyes aconseja tomar 8 vasos de agua en adelante al día, comer frutas, hortalizas y verduras. Elegir ropa y calzado ligero, en colores claros y evitar la exposición solar entre las 10:00 a. m. y las 4:00 p. m., y usar filtro solar
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Erika Rodríguez
Periodista, ganadora del Premio Nacional de Periodismo Turístico Epifanio Lantigua en la categoría Gastronomía y Turismo.