Santo Domingo.-El calor del verano se ha adelantado desplazando la primavera en más de un mes, un hecho que consolida los pronósticos de la Organización Meteorológica Mundial de que 2023 podría ser el año más cálido del que se tenga registro.
Santo Domingo llegó a registrar ayer 33 grados Celsius y una sensación térmica de 35 grados, esto debido a los efectos de las nubes de polvos del Sahara y la humedad por ser una ciudad costera.
“En lo adelante tendremos más calor. Lo que se ha registrado hasta ahora no es algo inédito, pero estamos frente a un año que se proyecta muy caluroso debido a los efectos del fenómeno de El Niño, en nuestro caso agravado por la presencia de las nubes de los polvos del Sahara”, explica la ingeniera Gloria Ceballos, directora de la Oficina Nacional de Meteorología.
El calor del verano, que según la academia empieza el 22 de junio, le ha ganado más de un mes a la primavera (del 20 de marzo al 21 de junio) y la sequía no ha sido rota en mayo, mes en que las lluvias forman parte de la tradición.
Las condiciones se han juntado para que los dominicanos tengan que desenvolverse en un calor más intenso que lo cotidiano y quizás durante mayor tiempo.
Gloria Ceballos es contundente al señalar que tenemos que acostumbrarnos a este calor, porque las proyecciones del año no dan pie para pensar algo diferente.
Efectivamente, tal como la directora de la ONAMET ha señalado, la Organización Meteorológica Mundial en un informe presentado en enero de este año destacaba que los últimos ocho años han sido los más cálidos desde que se tiene registro, siendo el de mayores temperatura el 2016 debido a que el fenómeno de El Niño fue “excepcionalmente intenso”, lo que contribuyó a que se registraran temperaturas mundiales sin precedentes.
Lo que ocurre en República Dominicana no es exclusivo de la región, forma parte de un fenómeno que se siente con intensidad en otras partes del mundo. Europa, por ejemplo, se prepara para un verano intenso.
Las Naciones Unidas advirtió de la creciente probabilidad de que el fenómeno meteorológico de El Niño se desarrolle en los próximos meses, provocando un aumento de las temperaturas globales y posiblemente nuevos récords de calor.
«Esto cambiará las pautas meteorológicas y climáticas en todo el mundo», declaró a la prensa en Ginebra Wilfran Moufouma Okia, jefe de la división de servicios regionales de predicción climática de la Organización Meteorológica Mundial de la ONU.
El Niño, que es un patrón climático natural típicamente asociado con un aumento del calor en todo el mundo, así como sequía en algunas partes del mundo y fuertes lluvias en otros lugares, se produjo por última vez en 2018-2019.
El récord
43 Grados celsius
Se registró en el municipio de Mao en 1953, siendo la temperatura más alta de la que se tenga constancia.