El agua como prioridad; no basta con decirlo

El agua como prioridad; no basta con decirlo

El agua como prioridad; no basta con decirlo

Ing. Teodoro Tejada, expresidente del Codia.

*Por Teodoro Tejada

El abogado Orlando Jorge Mera, ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, en el marco de la celebración del Día Mundial del Agua, al pronunciar las palabras de apertura del panel virtual realizado por la Cooperativa Vega Real, titulado “El agua y su impacto en República Dominicana”, aseguró que el agua es la prioridad más relevante y decisiva de su administración, aseguro que es urgente e impostergable trabajar con una agenda completa sobre el cambio climático en República Dominicana.

Continúo diciendo que la protección de Valle Nuevo y la Cordillera Central es de suma importancia, pero no se refirió al cuidado que, debe tener también la Cordillera Septentrional, y es obvio no referirse a esta ya que tendrá que aprobar uno de los proyectos principales que pretende construir el gobierno del cambio, “la Autovía del Ámbar” que impactara negativamente el medio ambiente de esta zona de grandes nacimientos de ríos, muy especialmente el río Yásica que nace en la parte norte de esta cordillera y aporta gran parte del agua potable para los habitantes de Puerto Plata.

Un informe del Banco Mundial titulado “Situación crítica: el cambio climático, el agua y la economía”, dado a conocer en agosto del 2016, advierte que, si no se toman medidas a tiempo, la escasez de agua, originada por el cambio climático, podría conllevar la reducción de hasta el 6% del producto interno bruto(PIB) en algunas regiones, provocar migraciones y general conflictos.

Será una limitante para el crecimiento económico, tendremos menos disponibilidad de agua dulce para el consumo humano, al igual que para la electricidad y la agropecuaria, lo que podría llevarnos a que para el año 2050 la reserva de agua disminuya a por lo menos dos terceras partes con relación a los niveles del 2015.

El Banco Mundial, plantea en su informe, que esto se puede revertir, neutralizando los impactos negativos del cambio climático sobre el agua, aplicando acciones de mayor eficiencia del recurso.

El Día Mundial del Agua se origina en la Conferencia de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente y el Desarrollo, celebrada en Río de Janeiro, Brasil, del 3 al 14 Junio de 1992; después de este evento la Asamblea General de las Naciones Unidas, aprobó la resolución consagrando el 22 de marzo de cada año Día Mundial del Agua.

En ésta ocasión tan importante para la existencia de la vida, no vimos una actuación protagónica del ministro Jorge Mera, que no sea este panel, es importante que, entienda que la única forma real de producción de agua es por medio de las precipitaciones o caída de lluvias, es urgente que la cartera que él dirige actúe y emprenda un verdadero programa de políticas públicas de siembras de árboles a nivel nacional de las cuencas Hidrográficas, no solo en la zona fronteriza donde se pretende sembrar 35 mil árboles, de los cuales de sembraron tres mil, al conmemorarse el 21 de marzo el día Internacional del Bosque.

Los fenómenos atmosféricos, son alteraciones de la atmósfera, entre ellos la lluvia, que son fenómenos naturales que benefician la vida humana, que se convierten en desastres naturales, por la falta de acciones desde el estado en realizar acciones de canalización y encauzamiento de ríos y arroyos, para evitar que las grandes avenidas produzcan desbordamientos de ríos, lo que ocasiona pérdidas de agua por escorrentía que se podrían aprovecharse en los embalses de las presas para lograr tener un buen almacenamiento de agua, evitando que con estas crecidas de ríos y cañadas, inundaciones provoquen lamentables pérdidas de vidas y económica de país por los daños a las infraestructuras hidráulicas, viales y de viviendas, así como a la agricultura.

Hasta ahora no hemos visto en medio ambiente un trabajo concreto a favor de la producción de agua para decir que, el tema agua es la prioridad en la actual administración, no es con decirlo que se demuestra el interés a favor de la preservación y producción de agua, es actuando de manera concretas y creíbles, no con promesas.



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