
Por JAY REEVES y ROBIN McDOWELL
Associated Press
Si hay algo en lo que todos los estadounidenses están de acuerdo es en que la política actual los asquea. A pesar del malestar, no obstante, dicen que siguen creyendo en el experimento democrático, sustentado en un modelo según el cual el gobierno debe proteger los derechos de la gente común a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad.
Hay valores fundamentales que añoran, aunque cuesta definirlos y parecen bastante distantes.
Donald Trump dice que hará “que Estados Unidos vuelva a ser grande”. Hillary Clinton responde que el país “nunca dejó de ser grande”. Pero, ¿qué quiere decir todo eso?
La Associated Press entrevistó a una cantidad de estadounidenses para darse una idea de lo que piensan sobre la grandeza del país luego de ocho años de Barack Obama en la presidencia.
Las respuestas variaron ampliamente, aunque quedó claro que la gente piensa que, comparado con otras naciones, el país marcha bien, tal vez muy bien. Pero hay mucho por hacer.
“Sí, Estados Unidos es un gran país, que podría ser mucho mejor si los políticos no se peleasen entre ellos todo el tiempo”, afirmó Rodney Kimball, vendedor de cocinas de 74 años de West Bethel, estado de Maine.
“Los gobiernos tienen que empezar a hacer lo que beneficia a la gente”.
El país está dividido y hay una enorme desconfianza en los políticos y en el gobierno.
