Santo Domingo.- La Embajada de Estados Unidos en República Dominicana entregará 6.6 millones de dólares para la reforma de la Policía Nacional, como parte de los acuerdos ratificados y extendidos este miércoles entre ambas naciones.
La donación se hará a través de la Carta de Acuerdo entre el Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Dominicana y el Departamento de Estado de los Estados Unidos.
Los gobiernos de la República Dominicana y de los Estados Unidos iniciaron este miércoles, con la participación del presidente Abinader, un Diálogo de Alto Nivel sobre Reformas Institucionales, que incluye ratificación y extensión de acuerdos.
Los acuerdos fueron firmados por los ministros de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez, y Robert Thomas en el Palacio Nacional.
Estados Unidos elogió hoy los cambios que lleva a cabo el gobierno de Luis Abinader hacia una mayor transparencia y su deseo de consolidarlos para las futuras generaciones.
Al mismo tiempo, manifestaron al presidente Luis Abinader su disposición de ser sus aliados en este esfuerzo.
Hablando en representación del gobierno estadounidense, el encargado de negocios de la embajada norteamericana en el país, Robert Thomas, dijo que esos cambios tienen el potencial de ser transformadores para la República Dominicana.
“ Nuestro Equipo de la Embajada de los Estados Unidos está hoy aquí porque queremos ser su socio en este esfuerzo”, puntualizó el diplomático.
Thomas aplaudió el compromiso del Gobierno del presidente Abinader con la independencia de la Cámara de Cuentas y destacó la transparencia del proceso de selección de la nueva junta directiva.
El presidente Abinader se refirió a la buena sintonía entre la administración estadounidense y la dominicana, que encuentran en la seguridad ciudadana un elemento común, a la que prestan la mayor atención y, sobre la cual, entiende necesaria la colaboración al más alto nivel.
Manifestó gratitud por el gesto por la importancia que tiene para el Gobierno completar la reforma policial cuanto antes.
Sostuvo que del éxito de un efectivo sistema de seguridad ciudadana se desprenden las garantías de paz y libertad de los pueblos.
Reafirmó que tiene el compromiso con la ciudadanía de que la República Dominicana será un país para la convivencia y el respeto a los derechos individuales, el crecimiento económico y el desarrollo de las familias y sus proyectos de vida.
El jefe de Estado destacó, asimismo, la importancia del Plan Nacional de Seguridad que presentó hace unas semanas y de su consecuente Comisión como un avance en esa línea sobre la que quieren trabajar desde el Gobierno.
“Con la formalización de ese grupo de trabajo dimos el primer paso para la tan anhelada transformación y profesionalización integral de nuestra Policía Nacional” puntualizó.
Significó que cree firmemente que la seguridad ciudadana es un elemento nuclear para toda democracia, y que el Pueblo dominicano merece vivir en paz y en libertad.
El presidente Abinader explicó que los Estados Unidos, además del apoyo a la reforma de la Policía, también respaldan iniciativas en la luchar contra la corrupción, mejorar la transparencia y la seguridad ciudadana.
Consideró que las relaciones entre el país y los Estados Unidos de América pasan por un gran momento, cuando la cooperación mutua se ve fortalecida por las acciones que emprenden los gobiernos de ambas naciones en pos del desarrollo de los pueblos.
Asimismo, por el crecimiento de las economías y el fortalecimiento de los sistemas democráticos.
Por parte de la Embajada de los Estados Unidos estuvieron presentes William Swaney, ministro Consejero en funciones; Todd Christiansen, director de la Oficina Internacional de Asuntos Antinarcóticos y Procuración de Justicia (INL); Rebecca Latorraca, directora de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID); Alexander T. Bryan, consejero político y económico y Alex Titolo, consejero para Asuntos Públicos; Eric Wolff, Consejero Comercial; Sherie Rebollo, Agregado Jurídico; David Billings, Subdirector de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
Representando el Gobierno dominicano también participaron Lisandro Macarrulla; el ministro Administrativo de la Presidencia, José Ignacio Paliza;; José Manuel -Jochi- Vicente, ministro de Hacienda; Jesús-Chú-Vásquez, ministro de Interior y Policía; Mayra Jiménez, ministra de la Mujer, y el consultor jurídico del poder Ejecutivo, Antoliano Peralta.
Entre los invitados, igualmente, Miriam Germán, procuradora General; la directora de Ética e Integridad Gubernamental, Milagros Ortiz Bosch y Janel Andrés Ramírez, presidente de la Cámara de Cuentas.
No hay vuelta atrás
“La ratificación de estos acuerdos y la puesta en marcha de otras tantas acciones que estamos llevando a cabo sintetizan el espíritu de cambio que queremos como impronta en el Estado dominicano y en su futuro”, señaló el mandatario.
Añadió, que se basarán en un modelo de seguridad verdaderamente eficaz, y llevado a cabo bajo el escrupuloso respeto a las garantías constitucionales establecidas por el ordenamiento jurídico.
“Un acto de vital importancia en el que ambos gobiernos, entre otras cuestiones, extendemos la vigencia de nuestros acuerdos en esas materias, reafirmamos nuestra confianza mutua y ratificamos el compromiso con el mantenimiento de nuestras excelentes relaciones bilaterales”, expresó el gobernante.
Significó las garantías que brinda un sistema de seguridad ciudadana competente resultan claves para el desarrollo socioeconómico que aportan las inversiones extranjeras, las que traen consigo, además, la generación de puestos de trabajo de calidad y el crecimiento de la pujante industria turística.
“Sin esas garantías de seguridad, paz y tranquilidad, difícilmente puedan fluir hacia nuestro país esas inversiones que forman parte del ecosistema del cual se nutre el Estado del Bienestar que queremos proteger y consolidar”, recalcó .
Citó la experiencia fallida de anteriores gobiernos que han intentado poner sobre la mesa esta realidad que pesa tanto, sin embargo, sus esfuerzos no dieron frutos. Admitió que hay obstáculos y que no será fácil cambiar una cultura tan arraigada desde hace muchos años.
“Pero sé también, como he dicho en varias ocasiones, que este es el momento para impulsar esas reformas. Y que estamos preparados, que el país está preparado. Y no hay vuelta atrás”, advirtió.