Dos jóvenes le pusieron dos pastillas de viagra en la bebida de su amigo de 13 áños, en Argentina como broma.
Tras ingerirlas el empezó a sentir un malestar acompañado de hinchazones y dolencias, que acabaron con el menor en urgencias.
Los médicos pudieron controlar los efectos negativos del fármaco, pero pudo haberlo matado.