Santo Domingo.- Antes de los tradicionales excesos gastronómicos de las navidades, muchas personas recurren a dietas muy restrictivas basadas en vegetales o incluso al ayuno con la intención de “compensar” las comilonas posteriores. Sin embargo, el médico y nutricionista Jesús Vázquez advierte que esta estrategia no es eficaz y puede provocar el efecto contrario.
En entrevista con EFE Salud, el especialista explica que lo ideal es preparar el cuerpo dos días antes de las celebraciones reduciendo al máximo los hidratos de carbono y los vegetales, para activar la quema de grasa y evitar la inflamación y la retención de líquidos.
“Hay que preparar el cuerpo para que no se asuste, como una caldera a la que se le aumenta la capacidad de quemar lo que se consume de golpe en los días festivos”, señala Vázquez.
Lea también: “Las redes sociales están mandando mucha gente a terapia”, alerta psicóloga clínica
Preparación previa: proteína y menos hidratos
El organismo obtiene energía principalmente de los hidratos de carbono y los vegetales, que se almacenan en forma de glucógeno en el hígado y los músculos. Cuando estos depósitos están llenos y se producen ingestas copiosas, el exceso de calorías termina convirtiéndose en grasa abdominal.
Para evitarlo, el especialista recomienda una dieta centrada en proteínas durante los dos días previos a las fiestas: caldos no vegetales, pescado, huevos y carnes magras como pollo o conejo.
“Un caldo de pollo con tortilla francesa para comer, y pescado o mariscos a la plancha para cenar es una buena opción”, sugiere.
Menos kilos y menos líquidos retenidos
Según el nutricionista, la media de aumento de peso en Navidad suele ser de entre 2 y 4 kilos, aunque gran parte corresponde a líquidos retenidos. Con una preparación previa adecuada, asegura que es difícil ganar más de uno o kilo y medio.
“Si llegas con el cuerpo en modo quema de grasa, es mucho más fácil controlar el peso”, afirma.
Después de las fiestas: depurar y descansar
A diferencia de los días previos, tras varios días de excesos sí se recomienda una dieta baja en calorías y rica en vegetales para depurar el organismo.
“La compensación siempre debe hacerse después, no antes”, insiste Vázquez. Caldos vegetales, piña, pescado a la plancha o incluso una cena ligera a base de fruta ayudan a reducir la inflamación y eliminar líquidos.
El hígado, al que define como “una depuradora gigante”, necesita descanso tras las fiestas, y el agua es clave para facilitar la eliminación de toxinas.
Masticar y moverse también cuentan
El especialista subraya la importancia de masticar despacio, ya que favorece la saciedad y reduce la inflamación. Además, recomienda mantener la actividad física antes y después de las celebraciones.
Antes de Navidad, ejercicios de fuerza ayudan a vaciar los depósitos de glucógeno, mientras que después es mejor optar por actividad aeróbica como caminar a buen ritmo.
Consejos sencillos que permiten disfrutar de la gastronomía navideña sin que la báscula pase factura.
Etiquetas
EFE
EFE es la primera agencia de noticias en español y distribuye 3 millones de noticias al año en texto, fotografía, video, audio y multimedia.