Santo Domingo.-Tener el privilegio de dar vida a otros a través de la donación de órganos, células y tejidos, es un acto de amor y solidaridad que pocos se atreven a hacer, a menos que la situación les toque de cerca.
Hay mitos y leyendas que impiden que alguien done. Estos van desde cuestiones religiosas, supuestos secuestros para extracción de órganos hasta la venta y compra ilegal de estos.
Estas creencias suelen crear temores y confusión que son lesivos para generar en la gente seguridad y disposición para ser donantes. Sumado a esto, la negativa de las familias y el nivel cultural.
Falta de información
De ahí se desprende, según el director del Instituto Nacional de Coordinación de Trasplante (Incort), Fernando Morales Billini, que para algunas familias resulte hasta insultante que si el familiar tiene muerte encefálica se le proponga donar los órganos.
Y es que la muerte encefálica (ME) es considerada como el deceso del individuo, y en países como España el 95 por ciento de los trasplantes se realizan con órganos de donantes en estas condiciones, ya que estos pacientes están conectados a respirador mecánico y los órganos se mantienen recibiendo oxígeno.
“Esa es la oportunidad de salir por la puerta grande, es un honor donar. Las sociedades que tienen una cultura de trasplantes valoran eso”, enfatizó Morales.
En el caso de los tejidos no pasa igual, por lo que se puede sacar piel, cartílagos, huesos, válvulas cardíacas y córneas, hasta 12 horas después de haber fallecido.
Barrera
En tanto, la escasez de órganos, es decir, de donantes, en el país y el mundo, es la principal barrera para que los pacientes que lo necesitan puedan acceder al trasplante.
En ese sentido, Morales sostuvo que en la República Dominicana mueren aproximadamente 3,000 personas cada año por falta de un trasplante, sea este de riñón, páncreas, hígado, corazón y otros.
Hay que recordar que el hígado es el único órgano que se regenera, por lo que al donar parte de este, a los pocos meses vuelve a su tamaño.
La limitada capacidad para suplir las necesidades de trasplante ha llevado al tráfico de órganos, por lo que según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre el cinco y 10 por ciento de los trasplantes en el mundo se hacen bajo algún tipo de comercialización.
Especulación
El director del Incort explicó a EL DÍA que esa especulación que se genera cada cierto tiempo en el país, regando la voz de que se están robando niños para quitarle los órganos, hace que la entidad pierda años de promoción para la creación de confianza.
Hacerlo saber es clave
— Para ser donante
Cuando una persona decide que algunos de sus órganos sean donados después de su muerte, debe hacérselo saber a sus familiares, para que así su decisión sea respetada y pueda ayudar a mejorar la calidad de vida a otros.