Bloomberg News.-Compañías desde Lloyds Banking Group Plc hasta Danske Bank A/S han cerrado sucursales y devuelto depósitos en Irlanda luego de que el peor derrumbe inmobiliario de Europa occidental desestabilizara el sector. Conforme el país se recupera, el poder vuelve a manos de Bank of Ireland Plc, que opera desde 1783.
Danske Bank, la mayor entidad crediticia de Dinamarca, cierra cuentas y devuelve los depósitos a los clientes irlandeses. Lloyds, que tiene sede en Londres, ya se ha ido, mientras que Royal Bank of Scotland Group Plc y el holandés Rabobank Groep reducen sus dimensiones en Irlanda. Bank of Ireland, la única entidad crediticia local más allá del control del estado, es el principal beneficiado.
“Se reconoce cada vez más que Bank of Ireland es el defensor nacional del mercado bancario irlandés”, dijo Ciaran Callaghan, analista de Merrion Capital en Dublín, que recomienda a los inversores comprar deuda Tier 2 de Bank of Ireland con vencimiento en 2022.
“En momentos en que los actores extranjeros se retiran, crece el poder de los locales”.
Sus bonos subordinados con vencimiento en 2022 rinden alrededor de 6,8 por ciento.
