País - Jornada Social de Cirugía en el CEDIMAT, en donde se les practico cirugías obstétricas a tres pacientes sin costo. La jornada fue encabezada por los cirujanos Dr. Eliazar Santana, y el Dr. Francisco Álvarez. Ariel Díaz-Alejo / Periódico Hoy / 12 de junio del 2010.
Santo Domingo.-El director del Instituto Nacional de Coordinación de Trasplantes (Incort), Fernando Morales Billini, dijo ayer que el robo de órganos en República Dominicana es “una leyenda urbana”.
La aclaración del especialista surge tras la información difundida por algunos medios sobre una osamenta encontrada en unos matorrales en La Cuaba, del kilómetro 23 de la autopista Duarte, los cuales supuestamente pertenecen a la niña Carla Massiel Cabrera Reyes, quien fue raptada y presuntamente asesinada para extraer algunos de sus órganos.
La Policía hasta el momento no ha confirmado que los restos hallados sean de la niña de 10 años de edad, quien desapareció de su hogar en Pedro Brand en junio de 2015.
Tras ser entrevistado vía telefónica en el programa radial Cuentas Claras, que se trasmite por la Nota, 95.7 FM, el especialista considera que las noticias sobre la extracción ilegal de órganos son leyendas urbanas y que circulan cuando hay escasez de información.
“Nos vemos en la necesidad de desmentir esto y decirle al pueblo dominicano que estas son leyendas urbanas, son inventos, ya que en nuestro país esto es imposible, no se ha determinado en el mundo un solo caso y si existe es aquel que por una situación económica muy difícil se atreve a vender un órgano, pero esto es penalizado”, aclaró.
Resaltó que en nuestro país solamente pueden ser donantes el 2 o 3 % de todo el que fallece en un hospital.
Además explica que para llevar a cabo la extracción de órganos que es un procedimiento complejo se requieren más de 40 especialistas, además de otros elementos técnicos que mantienen los órganos extraídos en correcto funcionamiento.
«Los órganos tienen que estar debidamente oxigenados a través de sustancias que se aplican a los órganos antes de extraer de la persona fallecida para que pueda seguir con la función orgánica, esos elementos impiden que la práctica ilegal pueda hacerse de la forma que se dice», aseguró.
Morales Billini indicó que el país no cuenta con un laboratorio de compatibilidad que de servicio 24 horas para hacer pruebas inmunológicas, por lo que manifiesta que no es posible garantizar una compatibilidad de los órganos que van a ser extraídos de una persona.
El doctor demanda que las autoridades competentes sancione este tipo de informaciones, ya que pueden ser camuflajes utilizados para esconder el verdadero móvil del secuestro.
Asimismo, manifestó su preocupación ante la rápida difusión de estas noticias, en el sentido de que la donación de órganos se realiza gracias a las familias dominicanas.
«Cuando tu le provocas miedo e incertidumbre y desconfianza a una familia donante, le están haciendo un daño terrible al quitarle la capacidad de decidir en favor de la donación», argumentó.
El especialista dijo que «desgraciadamente las causas que quizás llevaron al secuestro no son las que se están vertiendo, ya que en nuestro país sólo 126 donantes familias han donado órganos de familiares fallecidos en condiciones de ser donantes».
Morales Billini afirmó que de los 126 donantes para trasplantes, ninguno pertenecen a infantes, porque generalmente un 80% de los trasplantes son realizadas a personas adultas.
«El donante más joven es de 16 años porque los órganos inmaduros de un niño difícilmente pueden ser trasplantados, pero también son realizados», añadió.
Enfermedades terminales
Al ofrecer cifras sobre la mortalidad por enfermedades terminales de órganos, detalló que en República Dominicana mueren más de 2,000 personas al año, siendo mayores los decesos por esta causa que por otras enfermedades infecto- contagiosas.
El cirujano expresó su impotencia ante la elevada cifra de mortandad y expresó » lamentablemente es un tema silente en nuestro país, hay mucha gente que muere ante los ojos de su familia y médicos que los atienden por no disponer nosotros de un gran programa de donación y trasplante».
Dijo que la mayoría de las muertes ocurren porque el instituto no dispone de un financiamiento que les permita preparar los pacientes que atienden para dichos procesos.
«Hay aproximadamente 2,500 pacientes entre diálisis peritoneal y hemodiálisis que se beneficiarían de un trasplante renal, hay más de 400 pacientes en una clínica de fibrosis hepática, divididos en varios hospitales de nuestro país, el que más pacientes tiene es el instituto de Gastroenterología del Hospital Luis Eduardo Aybar que tiene un promedio de 300 pacientes», citó.
Morales Billini indicó que la supervivencia de un órgano al año es más de un 90% y lleva al individuo a realizar una vida normal, por lo que recomendó a los periodistas dominicanos a no divulgar informaciones que afecten la donación de órganos.
Finalmente exhortó a la población a contribuir con la promoción de donación de órganos y de esta forma contribuir a salvar vidas.