SANTO DOMINGO. -El gobierno dominicano tiene 10 mil soldados de las instituciones del Ministerio de Defensa a todo lo largo y ancho de los 376 kilómetros de la frontera con Haití, como parte de un nudo de seguridad y protección de la soberanía nacional y prevención de migraciones ilegales y contrabando, informó este domingo el ministro de Interior y Policía.
Jesús Vásquez (Chu) explicó que ese operativo opera bajo seguimiento permanente del presidente Luis Abinader y monitoreo del ministro de Defensa, teniente general Carlos Luciano Diaz Morfa, de quien dijo ha asumido con responsabilidad y diligencia su deber frente a esa situación, especialmente luego del asesinato del presidente haitiano Jovenel Moise, el pasado 7 de este mes.
Entrevistado en el programa “Aeromundo”, que produce el periodista Guillermo Gómez, el funcionario dijo que, era obvio que ante una situación como el magnicidio en Haití, la República Dominicana adoptara diversas medidas ante la realidad de dos naciones que comparten una misma isla.
Vásquez significó que desde que se conoció la noticia, el presidente Luis Abinader condenó la muerte de su homólogo y declaró el territorio nacional en estado de máxima alerta, en combinación con el cierre de fronteras y el cese de las operaciones aéreas desde y hacia la República de Haití.
Abinader también convocó al Consejo de Seguridad y Defensa Nacional y decidió siete puntos para resguardar a la República Dominicana de posibles repercusiones y también activó el plan Gavión, con el que se ordenó el reforzamiento del patrullaje en los puntos críticos de la frontera con tropas de unidades tácticas especializadas.
Los cuatro puntos de la frontera fueron cerrados para todo el tránsito de vehículos y personas. Con la tercera medida se suspendieron, hasta nuevo aviso, las actividades de los mercados binacionales en las provincias fronterizas.
El ministro de Interior y Policía también defendió con vehemencia la construcción de una verja en la frontera con Haití, tras destacar que la misma tendrá incidencia en la paz y desarrollo de ambos territorios.
Los tramos construidos se sitúan en los pasos fronterizos de Jimaní y Elías Piña, el segundo y tercero en importancia entre ambos países, y las obras todavía están en marcha.
La construcción ha sido realizada por el Ejército con el objetivo de controlar la inmigración irregular, además de cohibir el contrabando, el tráfico de armas y de drogas, así como el robo de vehículos y de ganado.
El tramo más extenso de la verja arranca en las orillas del lago Azuei y serpentea por las áridas colinas que bordean la ciudad dominicana de Jimaní, la más próxima al paso fronterizo situado en la carretera que comunica Santo Domingo con Puerto Príncipe.
La verja, de unos cuatro metros de altura, se asienta sobre una pared de ladrillos de cemento y está rematada por una espiral de alambre con cuchillas, ya con marcas de óxido en algunos tramos por la humedad del lago.
Vigilada a todas horas por los soldados del Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront), la verja corta en dos los senderos pedregosos que eran utilizados por los contrabandistas y traficantes para acceder a terreno dominicano desde el lago, según explican los militares que custodian la valla.
El ministro de Interior y Policía destacó que tal y como lo anunció el presidente Abinader, la construcción de una verja a lo largo de toda la frontera está acompañada de sistemas tecnológicos, como cámaras de reconocimiento facial, sensores de movimiento e infrarrojos.
El objetivo, según el ministro de Interior y Policía, es acabar en un plazo de dos años con la inmigración irregular, el narcotráfico, el contrabando y el robo de vehículos y de ganado.
Actualmente, las empresas interesadas en el proyecto de la nueva valla están elaborando sus levantamientos para presentar las propuestas para la construcción, que debería de empezar antes de final del año.
Llama perremeístas a tener paciencia
En otro orden, y en su condición de alto dirigente del PRM, el ministro de Interior y Policía llamó a los militantes y dirigentes de esa organización que no han sido designados en puestos públicos, a esperar que gobierno inicie dicho proceso y a tener paciencia y no desesperarse porque el «cambio prometido vendrá de forma gradual».
Aseguró que el presidente Luis Abinader quiere gobernar para todos, por lo que exhortó a los compañeros que aún no han sido nombrados a que confíen y esperen, “ya que está haciendo el mejor esfuerzo posible para poder satisfacer en gran medida las aspiraciones de los dirigentes”.
«El país vive momentos de grandes dificultades como consecuencia de esta pandemia COVID-19 que tanto daño ha hecho al mundo y especialmente a la República Dominicana. Este es un momento que el Gobierno tiene que actuar con toda la prudencia y con todo el tacto para poder enfrentar con éxito esta situación», indicó Vásquez.
El funcionario sostuvo que Abinader es un presidente comprometido, abierto y participativo, por lo que hará un buen gobierno del que podrán formar parte.
“Aquí hemos venido a servirles al país. Tienen que ser los mejores ciudadanos, no importa el partido político. Además, nosotros tenemos compromiso con el país y tenemos que respetar a mucha gente que tiene una hoja de servicio que le sirven a la patria”, expresó Vásquez.
Resaltó que de manera gradual todos los días se han ido nombrando en diferentes instituciones del Estado a dirigentes del Partido Revolucionario Moderno (PRM).