Desde hoy el país vivirá la experiencia de madurez política. El presidente Luis Abinader dejará el confort y la solemnidad del Palacio Nacional para reunirse en su residencia con Guillermo Moreno, líder de Alianza País, y con el expresidente Leonel Fernández en la Fundación Global y Democracia.
El gobernante no solo exhibe una actitud de humildad y de correspondencia política, sino que también piensa en el porvenir inmediato del país y valoriza las experiencias y el liderazgo de las principales figuras del acontecer nacional.
Auspiciar el acercamiento con los líderes de los partidos y de otros segmentos de la sociedad es un indicio de que el presidente Abinader muestra total interés en la búsqueda de las soluciones a los males vitales.
Entonces, ¿qué hacer? Los actores que se reúnen desde hoy deben evitar politizar el intercambio de las ideas y esta nueva experiencia que se instaura con los diálogos que promueve el Jefe del Estado.
Lo correcto puede ser que al término de cada encuentro con Guillermo Moreno, Leonel Fernández y con el PLD se ofrezcan detalles de los temas tratados.
