Santo Domingo.-La Organización Mundial de la Salud (OMS) difundió nuevas directrices para el tratamiento de la hepatitis B, enfermedad que causa a nivel mundial 650 mil muertes al año, a pesar de existir medicamentos para combatirla pero de muy alto costo, sobre todo en países menos desarrollados como República Dominicana.
La guía del organismo se enfoca en el uso de pruebas no invasivas para evaluar el estado de la enfermedad y facilitar el diagnóstico, así como pruebas sencillas que ayudarán a los médicos a tomar las decisiones clínicas correctas.
Contempla los cuidados del enfermo, pacientes que deben obtener el tratamiento, cuáles medicinas utilizar y cómo vigilar a largo plazo.
Las recomendaciones
Recomienda el organismo mundial de la salud el uso de pruebas de diagnóstico no regresivas, dar prioridad a los enfermos de cirrosis, usar tenofivir y entecavir como los medicamentos más eficaces para tratar la enfermedad crónica y hacer pruebas regulares para detectar cáncer de hígado.
La OMS indica que las prioridades de atención van dirigidas a enfermos con cirrosis, la etapa más avanzada de las enfermedades hepáticas, así como los co-infectados con VIH, niños, adolescentes y mujeres embarazadas.
El Programa Mundial de la OMS contra la hepatitis recomienda a pensar cómo mejorar el acceso a los medicamentos y en la mejor manera de ofrecer una atención de calidad basada en sus sistemas sanitarios.
La hepatitis B es una enfermedad caracterizada por inflamación en el hígado, que se contagia a través de la sangre y los fluidos corporales.
A nivel mundial, alrededor de 240 millones de personas tienen la enfermedad, con una mayor incidencia en África y Asia. Los enfermos con hepatitis B tienen un riesgo mayor de morir a causa de la cirrosis o el cáncer de hígado.
La Sociedad Dominicana de Gastroenterología sostiene que el tres por ciento de la población dominicana padece hepatitis B, y el 85 por ciento de los enfermos no lo sabe.