Boston.- El dominicano Rafael Devers tiene en ‘jaque’ la gerencia de los Medias Rojas de Boston, que debe decidir pronto si lo cambia o se queda con él.

Si los Medias Rojas permiten que Devers llegue hasta la agencia libre, en lugar de negociar, será imperdonable hasta el punto de la anarquía. En cambio, si los Medias Rojas lo intercambiaran recibirían un botín astronómico.

Devers está entrando en su último año de arbitraje con los Medias Rojas, donde probablemente ganará mucho dinero por el contrato de un año. Sin embargo, esto no es lo que los fanáticos de los Medias Rojas quieren ver.

Devers es posiblemente el mejor antesalista de la liga y definitivamente es uno de los 10 mejores bateadores en el juego.

Muchos analistas consideran que Devers no ha recibido una extensión de contrato porque Fenway Sports Group busca ahorrar dinero hipotecando a los Medias Rojas, aunque otorgaron grandes contratos a Trevor Story y Jackie Bradley Jr.

El agresivo grupo de gestión compró recientemente a los Pittsburgh Penguins y se rumorea que está impulsando una expansión de la franquicia de la NBA en Las Vegas. Además de estas empresas, también son dueños del Liverpool FC, en el que invierten millones de dólares cada temporada.

Expectativas

A pesar de perder 13 de sus últimos 17 juegos y estar tres juegos detrás de un puesto de comodín, los Medias Rojas no están teniendo discusiones comerciales que involucren a Rafael Devers y Xander Bogaerts, dijo el presidente del equipo, Sam Kennedy, durante una entrevista con WEEI (a través del Boston Globe).

Específicamente, Kennedy dijo que “no ha habido discusión ni comunicación interna o externa” sobre el intercambio de las dos estrellas locales del equipo.

Devers, de 25 años, está en la lista de lesionados con una distensión en el tendón de la corva y permanecerá bajo el control del equipo como jugador elegible para arbitraje en 2023.

Rechazó una extensión de contrato en los entrenamientos de primavera: se dijo que las dos partes estaban “muy lejos”. — y la figura de los Medias Rojas para tomar otra oportunidad de extenderlo este invierno.

Intercambiar a Devers parece una locura, pero recuerda, este es el mismo equipo que cambió a Mookie Betts a los Dodgers.

— Mejoría
El dominicano Devers, al momento de salir por lesión, bateaba para .324 (349-113), con 52 extrabases (29 dobles, un triple y 22 jonrones) y 55 empujadas en 87 juegos. Esa gran ofensiva la complementa con una gran defensa.