De vuelta en el mundo del béisbol, Derek Jeter afirmó que estará involucrado en las operaciones de los Marlins de Miami como uno de los nuevos dueños del equipo, y señaló que dependerá mucho del presidente de operaciones deportivas Michael Hill para aprender sobre la marcha.
Jeter y el accionista mayoritario Bruce Sherman hablaron ayer por primera vez desde que el grupo que encabezan compró los Marlins por 1.200 millones de dólares.
La conferencia de prensa fue dos días después que Miami terminó su octava temporada consecutiva con récord perdedor, la racha más larga en las mayores.
“Estamos reconstruyendo la franquicia”, dijo Jeter, una estrella en su época de jugador con los Yanquis de Nueva York.
“Estamos colocando a la gente adecuada en los puestos indicados”.
Aunque admitió que es un novato en la administración de un equipo, Jeter parece que ya aprendió a no ofrecer pistas sobre sus intenciones.
Rehusó decir si el toletero Giancarlo Stanton, el mánager Don Mattingly y otros permanecerán con los Marlins, o la dirección que quiere para el equipo. «¿Estás tratando de que te diga lo que voy a hacer?», respondió Jeter.