Santo Domingo.– Los derechos de las mujeres en República Dominicana están sufriendo “retrocesos” en todos los órdenes, denunciaron activistas con motivo de la celebración este miércoles del Día Internacional de la Mujer.
Este 8 de marzo encuentra a las mujeres “con enormes desafíos, amenazas de retrocesos y ataque a los derechos”, dijo a EFE Sergia Galván, del movimiento feminista de República Dominicana.
Puso como ejemplo la decisión de los senadores de aprobar un nuevo Código Penal sin incluir el aborto en las tres causales que reclaman grupos feministas y otros sectores de República Dominicana, uno de los seis países de América que mantienen una prohibición total de la interrupción del embarazo junto con El Salvador, Honduras, Nicaragua, Haití y Surinam.
Grupos defensores de los derechos de la mujer exigen que el Código Penal incluya en su articulado el aborto cuando la vida de la madre esté en peligro, cuando el embarazo sea causado por violación o incesto y si el feto tiene malformaciones que lo hacen incompatible con la vida, una demanda que está lejos de lograrse.
Además, la nueva Ley Electoral establece que la cuota de género en los cargos electos se aplique a nivel nacional y no por demarcación como ya había establecido el Tribunal Constitucional, lo que supone “un enorme retroceso político para la mujer”, afirmó la feminista.
Otros de los desafíos, agregó, son el combate efectivo a la violencia y al acoso sexual y la implementación de una educación en igualdad con perspectiva de género y preventiva de la violencia en las escuelas o igualdad en cargos electos.
La mujer dominicana, además, ha sufrido en los últimos años una disminución en los altos cargos de administración y decisión del Estado, dijo Galván, quien lamentó que en la actualidad solo dos de los veintitrés ministerios estén dirigidos por una mujer, lo que no ocurría “hacía mas de veinte años».
“Mientras el mundo avanza en esto, nosotros retrocedemos”, se quejó. Todo ello pese a que, las mujeres en el país tienen mayores niveles educativos que los hombres, pero esto no se traduce en una mejora de sus condiciones de vida y no es una garantía de una mayor y mejor participación en el ámbito laboral, como refleja un análisis de la Universidad Intec divulgado la víspera.
República Dominicana, uno de los países de la región con una de las mayores tasas de feminicidios y embarazos en adolescentes, “se encuentra en un contexto complejo” en materia de derechos de las mujeres, dijo a EFE Nicole Pichardo, del movimiento feminista nacional, quien reprochó la decisión de los senadores a la hora de votar el Código Penal, actualmente en manos de los diputados.
Desde la ONG Profamilia señalaron en un comunicado que un Código Penal sin causales “coloca a las mujeres en una situación de vulnerabilidad, vergüenza y miedo que les impide buscar ayuda médica ante abortos en proceso potencialmente mortales».
Recordaron que “ninguna ley ha logrado evitar los abortos clandestinos que cada año cuestan la vida de un número indeterminado de mujeres y que beneficia a los que negocian con la vida humana».