SANTO DOMINGO.- El movimiento olímpico nacional ofreció sus respetos al rendir tributo ayer al fallecido dirigente profesor Nelly Manuel Doñé, frente a cuyos restos mortales montaron guardia y desfiló la cúpula del Comité Olímpico Dominicano (COD), previo a su destino final en el cementerio Cristo Redentor. “El movimiento olímpico a nivel dirigencial ha quedado huérfano.
El único respetable se ha ido. Nelly Manuel Doñé se ha marchado y desde ayer forma parte de los respetables del Señor”. Así lo definió Luisín Mejía, quien por décadas lo tuvo a su diestra no solo escuchando los sabios consejos del ‘Cabo’ Doñé, sino aprovechando su capacidad de negociador y pacificador por excelencia en los momentos de mayor turbulencia en el Comité Olímpico Dominicano y en las federaciones deportivas nacionales.
Doñé, quien recibió cristiana sepultura ayer en la tarde, fue un ícono incomparable y el único respetable del movimiento olímpico, aseguró el presidente del ente olímpico dominicano.
“No hay calificativo que valga para definir su partida. Era el único baúl de consulta, también el más confiable y el único que imprimía respeto desde todos los frentes de nuestro movimiento”, precisó Luisín Mejía.