Washington.- Los demócratas en el Senado bloquearon el martes un intento republicano de prohibir los abortos tardíos, mientras que los líderes de la mayoría hacían esfuerzos para evitar una suspensión de actividades gubernamentales en ocho días a causa del tema, todo ello dentro de un enmarañado contexto de política en tiempos electorales.
Luego, en el primero de una serie de pasos cuidadosamente planeados, el líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, fijó una votación para el jueves para decidir una legislación provisional que mantendría al gobierno en operación hasta el 11 de diciembre.
Pero también bloquearía los fondos federales de Planned Parenthood durante un año, por lo que es previsible que los demócratas bloqueen esa medida, lo que prepara el terreno para votaciones subsecuentes de iniciativas para mantener al gobierno en operaciones pero que estén libres de la disputa sobre Planned Parenthood y el aborto.
Las disputas políticas sobre el aborto han enturbiado tanto las campañas para el Congreso como para la Casa Blanca.
Varios republicanos, indignados sobre los procedimientos de Planned Parenthood con tejido fetal para investigación científica, exigen acciones definitivas por parte de los líderes del partido.
“Si los republicanos en el Senado no pueden quitarle los fondos en este momento a Planned Parenthood, no tiene caso llamarlos republicanos”, dijo el gobernador de Louisiana, Bobby Jindal, precandidato del partido a la presidencia, en un tuit la semana pasada.
El presidente Barack Obama y los demócratas en el Congreso son los principales obstáculos, ya que los demócratas han bloqueado repetidamente cualquier legislación que perjudique los derechos de aborto.
“No creo que haya 60 votos en el Senado para tomar esa postura, lo que le indicará a la Cámara de Representantes que realmente necesitamos un proyecto de ley limpio para evitar una parálisis gubernamental”, dijo la senadora republicana de tendencia moderada, Susan Collins.
El martes, los demócratas en el Senado bloquearon la medida republicana que prohibiría la mayoría de los abortos tardíos.
El Senado votó 54-42 para hacer avanzar la propuesta, pero le faltaron seis votos para llegar a los 60 necesarios para superar las tácticas dilatorias de los demócratas.
La votación del martes fue la segunda desde que se dieran a conocer hace unos meses los videos de Planned Parenthood.
Se sostuvo menos de 48 horas antes del primer discurso en la historia de un papa en el Congreso, por el papa Francisco, quien es líder de la Iglesia católica, la cual se opone al aborto.
Algunos republicanos no están dispuestos a ceder ante la oposición demócrata.
“Debemos defender nuestros principios y nuestros principios son no rendirnos ante los demócratas”, dijo otro precandidato presidencial, el senador de Texas, Ted Cruz.
Pero otros republicanos insistieron que no tiene lógica un debate sobre el aborto que derive en una cancelación de actividades.
“Estoy cansado de la gente de mi lado del pasillo que ha estado usando esa estrategia, incluso cuando saben que no tienen los votos necesarios”, dijo la republicana de New Hampshire, Kelly Ayotte. “Por lo mismo, no pueden responder la pregunta “¿Qué debemos hacer para tener éxito?”.
Ultimadamente, los movimientos de McConnell parecen tener como objetivo una propuesta presupuestal temporal para la cámara baja, en donde las maniobras políticas sobre el aborto parecen tener desconcertados a los líderes republicanos.
Los líderes republicanos en la Cámara de Representantes han realizado varias votaciones sobre proyectos de ley contra el aborto, pero los resultados no han satisfecho a un puñado de conservadores republicanos que insisten en que la medida presupuestal obligatoria incluya retirarle a Planned Parenthood fondos de los contribuyentes.
McConnell ha prometido que no llegarán a una cancelación de actividades del gobierno, algo que los líderes republicanos temen que los votantes achaquen al partido.
La contienda es similar al intento fallido de hace dos años encabezado por Cruz para utilizar una medida provisional para intentar bloquear la implementación de la ley de cuidados de salud.
Eso provocó una cancelación parcial de actividades durante 16 días que los líderes republicanos esperan evitar en esta ocasión, particularmente porque la fecha de la elección presidencial está cada vez más cerca.
Por encima de todo está la debilitada postura política del presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, quien ha sido criticado por algunos conservadores de no ser lo suficientemente fuerte para combatir a Obama.
Algunos republicanos, incluyendo el líder de la mayoría en la cámara baja, Kevin McCarthy, y el gobernador de New Jersey, Chris Christie, han pedido a senadores republicanos que cambien las reglas del Senado para facilitar que la iniciativa de ley supere la resistencia demócrata.
“Apreciamos todos los buenos consejos que hemos recibido de la Cámara de Representantes y de candidatos presidenciales sobre como dirigir el Senado”, dijo McConnell irónicamente.
“Obviamente es una decisión que tomaremos nosotros mismos”. Otro tema, que ha pasado casi desapercibido hasta ahora, es que podría reducirse el mes entrante la entrega de cupones alimenticios a los pobres.
Ese es un cambio tras las cancelaciones de actividades gubernamentales de 2013 y 1995. Los detractores del aborto señalan que los videos demuestran que Planned Parenthood violó prohibiciones federales sobre lucrar con tejido fetal o cambiar los procedimientos de aborto para maximizar la cosecha de órganos fetales.
Planned Parenthood ha dicho que no ha quebrantado ninguna ley y que los videos fueron manipulados para distorsionar las conversaciones grabadas.
En el debate del martes, McConnell describió las características humanas visibles en los sonogramas fetales y dijo que los científicos aseguran que los fetos sienten dolor desde la semana 20 de gestación.
Los demócratas han resaltado que el Congreso Estadounidense de Obstetricia y Ginecología señala que el dolor fetal no se presenta sino hasta el tercer trimestre de gestación. Eso es mucho después de las 20 semanas.
La propuesta republicana impondría penas de hasta cinco años en prisión a médicos que realicen abortos después de las 20 semanas de embarazo.
La Cámara de Representantes aprobó dicha iniciativa en mayo. Cerca del 1% de los abortos reportados involucran gestación superior a las 20 semanas, de acuerdo a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.