SANTO DOMINGO.-El extoletero de los Medias Rojas de Boston David Ortiz hizo ayer sus primeros comentarios públicos, tras un intento de asesinato en Santo Domingo y dijo sentirse feliz de estar ya en su residencia de Boston junto a su familia.
Más de siete semanas después de recibir un disparo por la espalda, que estuvo a punto de costarle la vida, Ortiz a través de su página de Instagram valoró su nueva realidad como algo “único”.
“Encontrarme ya en casa y viendo a mi familia, celebrar su presencia, no tiene precio”, destacó Ortiz, tras salir el pasado viernes del Hospital General de Massachusetts, donde estuvo ingresado desde el pasado 10 de junio.
También agradeció a los fanáticos por sus oraciones. La publicación incluía unas fotografías de un corte de carne, pasta y pescado asado.
“Lo único malo es que no puedo matar la liga comiendo todavía”, agregó.
Órganos afectados
El expelotero, más conocido como “Big Papi”, fue sometido a tres intervenciones quirúrgicas las heridas que le afectaron el intestino delgado y grueso, el hígado, y también tuvieron que extirparle la vesícula.
Tras ser trasladado a Boston , Ortiz tuvo que ser sometido a otra intervención quirúrgica en el Hospital General de Massachusetts. Posteriormente el expelotero se tuvo que someter a una tercera tras sufrir algunas complicaciones en el proceso de recuperación; nunca se dieron a conocer los detalles en los partes médicos.
43 Años de edad.
Acaba de cumplir el “Big Papi”, quien fue operado en varias ocasiones por un equipo especializado.