Santo Domingo.- El presidente Danilo Medina defendió hoy las visitas sorpresas, tras asegurar que estas llevan esperanza a los campos que se puede vivir de la agropecuaria.
“Uno de los propósitos que tienen estas visitas sorpresa es llevarle la esperanza a los campos de que se puede vivir de la agropecuaria. Creo que lo hemos hecho, hay un renacer, una esperanza de que se puede estudiar agronomía y vivir con dignidad. El mundo está abocado incrementar la producción agropecuaria para dar seguridad alimentaria”, declaró Medina.
“Lo que queremos es que la gente produzca y tenga de qué vivir”, dijo el mandatario tras anunciar que de inmediato se iniciará el proceso de titulación de las tierras.
Aseguró que la República Dominicana vive un periodo de bienestar, con una cada vez mayor cantidad de ciudadanos que salen de la pobreza y se incorporan a la clase media.
“Hay un crecimiento en el bienestar de la gente. Cada vez más ciudadanos salen de la pobreza y se incorporan a las clases medias”, proclamó y agregó que el futuro que tiene el sector agropecuario es envidiable, ya que ningún otro tiene el potencial para crecer más.
El presidente hizo estos pronunciamientos en presencia de estudiantes de Agronomía y Agropecuaria de la Universidad Tecnológica del Cibao Oriental, que le pidieron apoyo para ejecutar un proyecto de siembra de 80 mil plantas de bambú en las márgenes del río Yuna y evitar así la inundación de las tierras de la provincia Sánchez Ramírez.
El presidente de la República calificó “ muy especial” el programa de siembra de bambú y felicitó a los estudiantes que lo ejecutarán por su decisión de integrase a un programa de reforestación de las cuencas de los ríos de la provincia Sánchez Ramírez.
Ordenó que a la Uteco le sean traspasados los terrenos que utiliza. Estos terrenos también pertenecen al Instituto Agrario Dominicano, que de inmediato iniciará los arreglos para su traspaso.
Tras anunciar su apoyo al proyecto de siembra de casabe y el asentamiento de las familias campesinas, el presidente les exhortó a que amplíen el programa para que más productores resulten beneficiados.
Dijo que de esta forma se ampliará la cantidad de tierras para la siembra de la yuca amarga y la capacidad de producción de la planta para la fabricación del casabe.
El presidente de la República exhortó a los parceleros a no vender sus tierras una vez posean los títulos definitivos, porque “si las venden, el dinero se termina; lo que no puede terminarse es la tierra. Este crédito es a una tasa sumamente cómoda para que los productores puedan pagar; pero el dinero hay que pagarlo, no es dinero regalado”