Santo Domingo.- El expresidente Danilo Medina aseguró que la costumbre del mandatario Luis Abinader de hablar todos los días ante la opinión pública le está generando un alto costo político, pues a su entender el Gobierno termina recurriendo a evasivas frente a los problemas nacionales y dejando sin respuestas concretas a la ciudadanía.
Medina confesó sentir una “sensación agridulce” al evaluar el panorama actual.
Por un lado, afirmó que percibe una especie de reivindicación de su obra de gobierno, al señalar que “al final, el pueblo me está dando la razón, porque con nosotros el país vivía mejor”.
No obstante, admitió que esa misma sensación le produce preocupación, ya que lo que se esconde detrás de esas comparaciones es un creciente descontento social.
“El pueblo no debería tener que llegar a esas conclusiones.
Lo que hay es un sentimiento generalizado de pérdida de esperanza, de falta de rumbo y de miseria en la que el presidente tiene mucho que ver, porque no ha dicho toda la verdad al pueblo dominicano”, declaró.
Críticas a la gestión actual
De acuerdo con Medina, la práctica del presidente Abinader de ofrecer respuestas improvisadas o incompletas frente a los cuestionamientos de la prensa es una señal de debilidad.
“¿Se responde con evasiva o se responde siempre sin tener una respuesta preparada? Esa es la consecuencia de hablar todos los días”, apuntó el exmandatario, quien gobernó entre 2012 y 2020.
El expresidente insistió en que la actual gestión ha perdido capacidad de conducir los destinos del país con claridad.
“Lo que observamos es un gobierno que responde con generalidades, sin asumir de frente los problemas que afectan a la gente”, sostuvo.
Defensa a la tanda extendida
Medina también salió en defensa de la jornada escolar extendida, una de las principales políticas educativas impulsadas durante sus gobiernos.
“Decir que la jornada escolar extendida fue un fracaso es una injusticia. Esa ha sido una de las políticas más nobles y cargadas de amor que se han implementado en la República Dominicana”, enfatizó.
Explicó que al dejar el poder ya había alcanzado un 85% de cobertura, y que la expansión total quedó pendiente porque implicaba construir nuevas escuelas para transformar las tandas dobles en tandas únicas.
“No es que fuera un fracaso; lo que pasa es que si después no se le ha puesto la atención adecuada, eso ya corresponde a la gestión que vino después”, puntualizó.