Los vestidos de novia que cubrían por completo las piernas, brazos y el pecho de las mujeres han pasado de moda, esto disgustó a un párroco, quien se dispone a imponer un impuesto a las novias por cada centímetro de escote.
El sacerdote veneciano Cristiano Bobbo dijo que está cansado de que las novias acudan con vestidos cortos.