
SANTO DOMINGO.-Son muchos los casos de mujeres que han sido abusadas de niñas y guardan ese secreto, casi hasta la tumba, y no lo confiesan ni a sus parejas que eligieron para formar un hogar y familia.
Y es que como se dice frecuentemente, cada cabeza es un mundo, y aunque lo correcto después de esta dolorosa experiencia es recibir terapia y vivir una vida orientada en asimilar de la mejor manera este suceso; ya sea por vergüenza o ignorancia, muchos callan y sufren los traumas sin el apoyo adecuado.
La terapeuta sexual y de pareja Heidy Camilo Hilario define el abuso sexual infantil como una conducta sobre un menor que es usado como un objeto sexual por otra persona con la que mantiene una relación de desigualdad, ya sea en cuanto a la edad, la madurez o el poder, sin el consentimiento del menor. Para el marco legal de nuestro país, esta diferencia debe ser de cinco años.
“Dentro de estos actos abusivos puede haber: el tocar el cuerpo del menor o pedirle que el menor toque al adulto con intenciones de satisfacción sexual, la masturbación, sexo oral, exhibicionismo (el agresor se exhibe y le pide a la víctima que se exhiba), la pornografía infantil, exponer al menor a la pornografía, la violación y el estupro”, dijo la experta.
Camilo, quien consulta en el Centro Vida y Familia, abunda que el abuso sexual infantil se realiza en un alto porcentaje en el entorno familiar, por lo que se suele esconder como si se guardaran esos secretos en un baúl del desván familiar.
Citando estadísticas, la profesional detalla que sólo el 10 % de los abusos sexuales a menores son cometidos por desconocidos, lo que significa que el 90 % de los casos ocurren dentro del entorno familiar de la víctima. Según datos suministrados por el consejo de Europa 1 de cada 5 niños son víctimas de abuso sexual.
Presentan amnesias
“Las víctimas de abuso sexual infantil suelen presentar algunos tipos de amnesias y es la manera de evitar los recuerdos una vez han finalizado los abusos como medida de protección.
Se evita recordar por una necesidad automática de supervivencia ya que se oculta a las personas cercanas que le podrían ayudar. El único interés es olvidar para dejar de sufrir y por un largo período de tiempo, se oculta en las profundidades para sobrevivir”, ejemplifica.
Camilo expresa que, en la adultez, se trae a la conciencia esos recuerdos por diferentes vías como una llamada de atención para tomar las riendas de la vida. Los recuerdos pueden aparecer como flashbacks gracias a la actividad onírica que los reactiva, es decir, en los sueños.
Manifiesta que otra forma en la que se activan estos recuerdos se presenta cuando la víctima inicia su vida sexual, la exposición a conductas sexuales pueden provocar una activación de los recuerdos o de los sentimientos relacionados al abuso que vivió. Explica que la pareja al no saber lo que está ocurriendo se desespera y asume ideas erróneas.
Camiloconcluye que “es importante que toda víctima de abuso sexual infantil asista a terapia, pues el dolor del trauma no se olvida, pero se puede aprender a vivir con él.
Las víctimas de abuso pueden tener vidas saludables, placenteras y funcionales, vida a la que todo ser humano tiene derecho”.
Lo callan
— Por vergüenza
Destaca que un elemento, sobre todo en mujeres que han sido abusadas de niñas, es que llegan a terapia luego de pasar un buen tiempo intentando poder tener un acercamiento sexual con la pareja, pero les resulta imposible, pues reexperimentan el abuso.
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Erika Rodríguez
Periodista, ganadora del Premio Nacional de Periodismo Turístico Epifanio Lantigua en la categoría Gastronomía y Turismo.