Un principio básico de investigación indica que el primer paso para resolver un problema es identificar el problema. Quizás ese principio y la forma destemplada en que han reaccionado algunos exjefes de la Policía Nacional al señalamiento hecho por un actual asesor para el proceso de reforma policial, explique porque tenemos tantos años con la corrupción e ineficiencia enquistada dentro de ese cuerpo armado.
Estos exjefes policiales han despotricado contra ese asesor por haber expresado lo que todo dominicano sabe, pero que al parecer ellos desconocían: la corrupción ha sido abundante en la Policía Nacional.
Si estos exjefes policiales desconocían que la corrupción estaba institucionalizada en la Policía Nacional, entonces quizás esa sea una de las razones por las cuales ese mal ha permanecido en ese cuerpo hasta el sol de hoy.
Esos exjefes policiales hoy son civiles y quizás entonces lo que estén es jugando a la politiquería, pero si en realidad su creencia es lo que han expresado, entonces el problema era mucho mayor de lo que se pensaba.
Reconocer e indentificar los males de la institución es un paso indispensable para la anhelada reforma policial.
No se trata de deprimir a los policías honestos que trabajan en esa institución, sino de hacerle ver que no están solos y que realmente se hacen esfuerzos por eliminar la corrupción institucionalizada y que en la Policía ha tenido rango superior.
EL DÍA tiene serias reservas sobre el proceso de reforma actual de la Policía Nacional, pero reconocemos que admitir el alcance del problema es un paso en la dirección correcta.