En el siglo XIX hubo quienes suponían que la persona zurda tenía el corazón en el lado derecho del tórax. Pero los anatomistas demostraron que no era cierto.
Hubo un tiempo que algunos países eran intolerantes con los zurdos y en escuelas estaba prohibido escribir con la izquierda.
Incluso en la década de los 80 y 90 había padres y maestros que ataban la mano “mala” a la espalda del niño zurdo para obligarle a usar la derecha.