Control de plaguicidas y pesticidas es urgente

Las intoxicaciones en escuelas son en sí mismas una causa importante de preocupación en San Francisco de Macorís, pero por este hecho debieran de estar sonando las alarmas en todo el país.

De acuerdo con las denuncias de casos, medio centenar de estudiantes han tenido que ser atendidos en centros asistenciales de salud, fundamentalmente por la inhalación de vapores de preparados químicos utilizados en predios agrícolas.

Productos utilizados en la agricultura para el control de malezas, hongos, bacterias e insectos siempre han llegado a las manos de quienes los utilizan, con advertencias de la peligrosidad de su utilización sin las medidas de seguridad apropiadas.

De acuerdo con miembros de la Asociación Dominicana de Profesores, la aplicación de productos con estas características en predios cercanos a escuelas ha provocado cerca de medio centenar de intoxicaciones en estudiantes, profesores y personal administrativo.

Esta es una denuncia alarmante, por las consecuencias y por las implicaciones.
La afección de las vías respiratorias no es la única consecuencia de entrar en contacto con pesticidas y herbicidas, ni son las personas las únicas que sufren los daños. También la vegetación circundante, las aguas y la vida en sentido general.

Se impone, por lo visto, la intervención de Medio Ambiente, Educación, Agricultura y Salud Pública, de manera que no sólo sea controlada la aplicación de estos químicos en el entorno de las escuelas en días de labor, sino que se extienda la prevención a las comunidades o habitantes vecinos de estos predios, los cursos de agua, la flora y la fauna.

La inocuidad de los alimentos debe ser cuidada con esmero, no importa si los productos agrícolas serán comerciados apenas en el mercado local.