Contra el olvido

Algunas efemérides se prestan para la rememoración y otras, particularmente de números de años impares, suelen ser puestas a un lado como si para el caso hubiera un acuerdo tácito.

Ocurrió con ocasión de los 50 años de la guerra de abril de 1965, cuando hubo una gran actividad rememorativa, y en alguna medida, pero con menos ardor, ocurre ahora, cuando se cumplen los 60.

Desde luego, hace diez años la vitalidad de los protagonistas y de los intelectuales y artistas electrizados por aquellos hechos era otra. Sin contar conque algunos, definitivamente, ya no están.

Parece importante, sin embargo, que a pesar del tiempo transcurrido haya todavía un interés notable en la rememoración.

Tal vez haya en esto de los aniversarios múltiplos de diez de los grandes hechos, algo que le concierna a las generaciones, para las que se relatan los hechos como en un esfuerzo contra el olvido.

Porque es importante que la gente no involucrada directamente dedique algún tiempo a la valoración de unos hechos como los del 65, que polarizaron a la sociedad dominicana al punto de llevarla a la confrontación armada por una razón de política nacional.

Si estos hechos y sus motivos no se olvidan quizás nunca volvemos a tenerlos.