Consumidores se quejan de falta de disponibilidad y tamaño del pollo

Consumidores se quejan de falta de disponibilidad y tamaño del pollo

Consumidores se quejan de falta de disponibilidad y tamaño del pollo

Consumidores observando disponibilidad de pollo en las góndolas del mercado público.

Santo Domingo .-“Estamos comiendo ciguas», exclamó Martha Holguín, expresando su frustración por el pequeño tamaño y alto costo de los pollos disponibles en los últimos meses en el Distrito Nacional.

“Es deprimente lo que se está llevando a las mesas”, lamentó la dama mientras buscaba en vano una pieza de pollo de tamaño decente en un mercado de la ciudad.

Enmanuel Jiménez, otro consumidor habitual, señaló que solía gastar mil pesos semanalmente en pollo para su hogar, pero ahora sólo encuentra piezas pequeñas.

Jiménez hizo un llamado al Gobierno para que preste atención a esta situación, ya que el pollo es la carne de mayor consumo en el país. “El precio sube cinco pesos cada semana; pasó de 85 a 90 pesos, y no sabemos hasta dónde llegará», lamentó mientras esperaba en un mostrador en una carnicería.

Argentina Martínez, otra cliente, también expresó su indignación por la calidad y precio del pollo. “Tú sabes lo que es pagar 90 y 95 pesos por una libra de pollo que no tiene carne. Esto es un abuso”, comentó la dama al indicar que creen que se trata de una forma de presionar alzas de precios en el mercado.

Cierre polleras
La escasez de pollo no sólo ha afectado la cantidad de carne disponible, sino también la cantidad de negocios que ofrecen esta proteína animal.
En el Mercado de Cristo Rey, cuatro negocios han tenido que cerrar debido a la falta de suministros a tiempo por parte de los proveedores.

Los comerciantes María Elena Ramírez y Ben Jiménez, quienes solían comprar mil libras de pollo, ahora reciben apenas 300 libras o menos. “Tenemos clientes que nos compran a diario 100 libras de pechuga, pero la escasez no nos deja cumplir», explicaron.

Bienvenido Germosén, otro comerciante, destacó que la situación se ha vuelto insostenible en los últimos siete meses. “Ahora el pollo viene de una libra y media y hasta menos, cuando para el comerciante poder ganar tiene que ser un pollo de cuatro a cinco libras», indicó.

Germosén explicó que, antes de la crisis, vendía entre 700 y 800 libras de pollo al día, pero ahora apenas recibe 140 libras.

Eran apenas las 10 de la mañana, y en el Mercado de Cristo Rey y colmados del Distrito Nacional no se encontraba pollo y donde quedaba apenas se era patas de pollo dejando a los presentes con la única opción de comprar esas piezas, un reflejo de la grave situación que afecta a consumidores y comerciantes por igual.

Buscan tener reservas
Ante la creciente preocupación, la Asociación Dominicana de Avicultura (ADA) dijo a EL DÍA que el país tiene más producción de pollo que años anteriores, pero con menor tamaño.

Según Pavel Concepción, miembro de la Asociación Dominicana de Avicultura, los efectos del cambio climático y las altas temperaturas han impactado significativamente la producción de pollo, reduciendo el peso promedio de las aves.

Sin embargo, enfatizó que los productores están haciendo todo lo posible para estabilizar el suministro y mejorar la situación en los próximos meses».

En los últimos meses, los productores avícolas en República Dominicana han visto una reducción significativa en la producción de libras de carne de pollo, a pesar de un aumento en el número de cabezas producidas. Concepción dijo que la producción total de pollos ha crecido, alcanzando un récord de más de 22 millones de cabezas en julio de este año.

Sin embargo, el aumento en la temperatura ha afectado la capacidad de los pollos para ganar peso, lo que ha resultado en una disminución del 5 % en la producción de libras de carne.

“El calor no sólo ha reducido la ingesta de alimento por parte de los pollos, sino que también ha incrementado la mortalidad en las granjas”, argumento el empresario.

Otros eventos

— Reserva
Los productores para mitigar los efectos del calor en la producción y reveló que están construyendo un cuarto frío con capacidad para almacenar hasta 8 millones de libras de carne de pollo en el Mercado Santo Domingo.