Con la llegada de los meses más fríos, los resfriados comunes se vuelven más frecuentes. Afortunadamente, existen medidas sencillas que puedes tomar para reducir el riesgo de contagiarte. A continuación, te compartimos algunos consejos clave:
Lávate las manos frecuentemente: Mantener las manos limpias es una de las formas más efectivas de evitar el contagio de virus. Usa agua y jabón durante al menos 20 segundos o utiliza desinfectantes a base de alcohol cuando no haya acceso a agua.
Evita tocarte la cara: Los virus del resfriado suelen ingresar al cuerpo a través de la nariz, la boca o los ojos. Evitar tocar estas zonas sin lavarte las manos puede prevenir el contagio.
Mantén una buena higiene respiratoria: Al toser o estornudar, cúbrete la boca y nariz con un pañuelo desechable o con el codo, y desecha el pañuelo inmediatamente para evitar la propagación de gérmenes.
Fortalece tu sistema inmunológico: Lleva una dieta equilibrada rica en frutas y verduras, bebe suficiente agua, y asegúrate de descansar lo necesario. También es recomendable hacer ejercicio regularmente para mantener tu cuerpo en óptimas condiciones.
Evita el contacto cercano con personas enfermas: Si alguien cercano tiene síntomas de resfriado, mantén una distancia prudente. En el caso de que tú estés enfermo, quédate en casa para evitar contagiar a otros.
Ventila los espacios cerrados: En ambientes cerrados, los virus pueden propagarse con mayor facilidad. Asegúrate de ventilar bien las habitaciones abriendo ventanas regularmente para que circule el aire.
Abrígate adecuadamente: Si bien el frío no causa el resfriado directamente, las bajas temperaturas pueden debilitar el sistema inmunológico. Viste ropa adecuada para mantener una temperatura corporal confortable.
Seguir estos consejos puede ayudarte a prevenir los resfriados comunes y mantenerte saludable durante la temporada invernal.