SANTO DOMINGO.- El Congreso Cívico solicita al presidente Luis Abinader que defina el escenario en que van a ser discutidas las reformas que él anunció al país en su alocución del pasado miércoles 9 de diciembre.
«Propuestas de ese tipo deben someterse al debate más amplio posible, para que su aprobación no resulte la imposición de un sector poderoso sobre los demás, sino el resultado de la participación enriquecedora de las fuerzas políticas y de los más variados sectores y organizaciones cívicas y sociales», indicó el movimiento.
El Congreso Cívico expresó a través de un comunicado que «nunca se limitará a la lucha por un mero cambio de gobierno o la simple sustitución de un presidente por otro. El sentido de su existencia es contribuir a la culminación de la revolución democrática que a lo largo de nuestra historia, ha sido frustrada por la injerencia de poderes extranjeros y las fuerzas reaccionarias nativas».
«Como ocurrió a la caída de la tiranía trujillista en 1961, oportunidad histórica en la cual esas fuerzas maniobraron para cambiar apenas la fachada del viejo régimen y dejar viva la herencia de autoritarismo, caudillismo y presidencialismo que, junto a otros vicios de la vieja cultura política, gravitan aún en la vida nacional y el aparato estatal», añadió.
El vocero del movimiento, Rafael Chaljub, dijo que «ahora, cuando la voluntad de cambio y el espíritu de resistencia de nuestro pueblo, y la titánica lucha de las fuerzas democráticas y opositoras, hizo posible el desplazamiento del régimen peledeísta, se ha creado una nueva oportunidad que no debe desperdiciarse de promover transformaciones importantes en el orden político e institucional».
«En consecuencia, respaldamos toda reforma que signifique un avance en la superación de toda la mala herencia del pasado y contribuya a la democratización del aparato estatal y las instituciones y normas que lo forman. Y en razón de que determinadas propuestas del presidente abren la posibilidad de debatir cómo fortalecer la transparencia, reducirle el campo a la corrupción y ampliar la participación del pueblo en la marcha de los asuntos públicos, el Congreso Cívico reafirma su disposición a intervenir en las discusiones a que deben someterse esos asuntos, y reclama el escenario y el espacio correspondientes para ejercer su derecho a ser oído y con voz propia y libre, exponer sus opiniones y sus propuestas», concluye Congreso Cívico.