SANTO DOMINGO.- El Cuarto Tribunal Colegiado del Distrito Nacional dictó prisión contra cuatro personas que fueron acusadas de la comercialización de una niña recién nacida y uso de documentos falsos.
Los condenados son Luisa Katis Fabal Montero, tres años de reclusión para la doctora Yohanny Suriel Díaz, dos años contra Nisaury Del Orbe y una condena de tres años de prisión contra el doctor José Rodríguez Reynoso, que deberán cumplir en distintos centros penitenciarios del país.
El órgano acusador indicó que en fecha 18 de enero 2018, se inició una investigación de los hechos a través del Departamento de Trata y Tráfico de Personas de la Procuraduría Fiscal del Distrito Nacional, a raíz de una denuncia hecha por la expareja de la acusada Nisaury Del Orbe, el cual indicó que la hoy condenada simuló un embarazo y haber dado a luz una niña el 4 de enero de 2018, engañando a sus familiares y a él mismo, conforme explicó ante el tribunal la procuradora fiscal Mariela Ramos.
El expediente acusatorio narra que Nisaury Del Orbe logró hacer uso de un certificado de nacido vivo y realizar la declaración de nacimiento de una recién nacida en las instalaciones de la Oficialía del Estado Civil de la 2da. Circunscripción del Distrito Nacional con asiento en el Hospital Universitario Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia.
Indica que a los fines de conseguir el certificado de nacido vivo, la imputada se acercó a su compañero de trabajo, el doctor Rodríguez Reynoso, y éste a su vez realizó las gestiones con su pareja, la también médico Yohanny Suriel Díaz, quien laboraba en el referido centro de salud.
La acusada Suriel Díaz obtuvo la constancia de nacido vivo, documento que había sido reportado como desaparecido por el hospital, y su posterior falsificación, con la acusada Fabal Montero, quien laboraba en el área de constancias del centro médico.
Además, la acusada Nisaury Del Orbe contactó una persona a los fines de que le ayudara a conseguir una recién nacida para hacerla pasar como suya ante su expareja y sus familiares. Por esta gestión la acusada ofreció la cantidad de RD$25,000.00, además de la suma de RD$200,000.00 que retribuía supliendo ropa, pañales y leche para la recién nacida cada vez que se la prestaban.
El Ministerio Público calificó los actos antes descritos como comercialización de Niños, Niñas y Adolescentes, toda vez que se realizó una transacción en virtud de la cual una niña fue transferida de una persona a otra a cambio de una retribución. Así como también, se presentaron cargos por complicidad en comercialización de niños, niñas y adolescentes, falsificación de documentos públicos, uso de documentos falsos y prevaricación.