Nueva York.- Conmoción, dolor, tristeza, indignación y rostro compungido, fue la escena que prevaleció este viernes durante las seis horas del velatorio de la anciana dominicana, Filomena Vargas (Mema), de 96 años, quien fuera brutalmente agredida la semana pasada por el joven dominicano Hansel Ramírez, de 24 años, porque la indefensa mujer no lo dejaba entrar al edificio número 131 de la avenida Nagle con la calle Arden, donde ella vivía.
El cuerpo de la nonagenaria mujer estuvo expuesto en la capilla A de la Funeraria Ortiz, ubicada en Broadway con la calle 190, en el mismo corazón del vecindario quisqueyano de Washington Heights.
Veintenas de dominicanos, desafiando torrenciales aguaceros, asistieron a dicha funeraria para darle el último adiós, entre ellos profesionales, políticos, agentes policiales, comerciantes, activistas comunitarios y empleados privados, entre otros representativos, quienes coincidieron en expresar que lo mínimo que la justicia debe aplicarle al agresor es “cadena perpetua”.
La señora Vargas deja en la orfandad a sus hijos Agustina y Andrés Columna, quien convivió con su madre en el mismo apartamento por espacio de 41 años. Asimismo, ella crió a sus siete nietos, Amalfi, Adams, Kenny, Andrés Jr., Claudio, Fernando, y Diana. También le sobreviven cinco bisnietos y un tataranieto. Era oriunda de Bonao.
Sus familiares todavía no se reponen del fallecimiento de Vargas y manifiestan, entre sollozos, que un pedazo de su alma, corazón y vida se ha ido junto a ella.
Unas de las plegarias que contiene el recordatorio específica “En el cielo ya disfrutan de tu bondad y alegría, mientras aquí en la tierra te echamos muchísimo de menos madre y abuela mía”.
La anciana falleció en el Allen Hospital NewYork-Presbyterian, después de permanecer una semana interna al sufrir la rotura de su cadera por la caída, recibir golpes en la cabeza y varios puñetazos y galletas propinados por el joven Ramírez, en momentos en que permanecía inmóvil en el suelo. Su cadáver será sepultado este sábado a las 11:00 de la mañana en el cementerio Mount Hope, en la ciudad de Yonkers.
El joven agresor se encuentra recluido en el Complejo de Detención de Manhattan y deberá comparecer ante un juez el día 28 del presente mes. Ha sido descrito por su tío Humberto Ramírez como muy violento, que le ha dado golpes contundentemente a su madre, rompía enseres en su casa, y a su padre Félix Ramírez, hace poco le rompió todos los vidrios de vehículo.
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El gran abusador después de cometer el hecho emprendió la huida, un escuadrón de detectives del precinto 34, integrado por los agentes Villavicencio, NG-Montalvo, Gresko, Martínez y Cumming lo arrestó. Ramírez había sido apresado anteriormente por invasión de propiedad.