Santo Domingo.- La transformación digital no se trata únicamente de incorporar nuevas herramientas tecnológicas, sino de un cambio profundo en la forma de pensar, decidir y generar valor dentro de las empresas.
Así lo explicó la directora de Desarrollo de Tecnología de la Información de Altice, Yara Fermín, al ofrecer una serie de recomendaciones dirigidas a las pequeñas y medianas empresas (pymes) que buscan iniciar su proceso de digitalización.
La ejecutiva recomendó tres pasos fundamentales como es digitalización con propósito, intervenir solo los procesos que realmente lo necesitan y acompañarse de las personas adecuadas.
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“Transformar no es solo cambiar sistemas, es cambiar mentalidades. Es unir tecnología, personas y propósito para generar valor de manera sostenible”, aseguró.
Detalló que digitalizar no significa gastar en exceso en infraestructura o tecnología, sino entender qué procesos realmente necesitan ser transformados.
“Hay que pensar en la empresa como un organismo con propósito. Primero se deben identificar los ‘puntos de dolor’, es decir, aquellos procesos que generan ineficiencias o dificultades, y enfocarse en automatizarlos. No se digitaliza lo que se ve, se digitaliza lo que duele”, expresó Fermín.
Aseguró que cada negocio tiene necesidades distintas. Un área que no representa un problema en una empresa puede ser crítica en otra. Por eso, dijo que la clave está en realizar un diagnóstico interno que permita definir qué procesos requieren intervención digital.
Además, aclaró que la transformación digital debe involucrar a la tecnología y a las personas por igual. “La tecnología y las personas tienen que caminar al mismo ritmo”, afirmó.
“No se trata solo de implementar herramientas por moda o por imitación, sino de comprender cómo esas soluciones pueden integrarse a los procesos y aportar valor real”, explicó.
La directora advirtió que muchas veces las empresas se enfocan únicamente en las herramientas, sin pensar en la coherencia de sus procesos ni en la calidad de la información que manejan.
“La base de toda transformación es la existencia de datos confiables. Deben garantizar la coherencia, la veracidad y la conexión entre todos los sistemas de la organización”, sostuvo.
Según señaló, la integración de la información en un solo ecosistema digital permite capturar y analizar los datos casi en tiempo real, con una visión estratégica orientada hacia el futuro.
“No se trata de mirar solo lo que pasó, sino de prever lo que viene. Las decisiones deben basarse en datos actuales y proyectarse hacia adelante”, puntualizó.
Como ejemplo, la ejecutiva destacó la importancia de analizar información estructurada y no estructurada, incluyendo los datos provenientes de redes sociales y otras fuentes externas.
Dijo que esto permite obtener una visión integral del negocio, descubrir patrones de comportamiento y tomar decisiones más informadas.
Sin embargo, la transformación digital no puede sustentarse solo en la tecnología, ya que el factor humano es determinante.
“El entrenamiento del personal es clave para que viva el proceso de transformación y lo adopte. Si la gente no entiende el propósito, los sistemas se vuelven confusos y los resultados se diluyen”, subrayó.