Bloomberg News.-El intento de Carlsberg A/S de calmar a los inversores asegurándoles que puede resistir las persistentes pérdidas en Rusia da pocos indicios de estar funcionando.
La compañía dinamarquesa, la mayor cervecera de Rusia, se vio afectada por una caída de 39 por ciento del rublo contra el euro el año pasado, la peor declinación monetaria a excepción del derrumbe de la hryvnia de Ucrania. La especulación de que Carlsberg no logrará recuperarse de la conmoción cambiaria ha llevado a un incremento de las apuestas a una declinación de las acciones de la compañía.
“Ya hace años que esperamos que Rusia se recupere tras una serie de reveses”, dijo por teléfono Frans Hoyer, un analista de Jyske Bank A/S que recomienda a sus clientes vender las acciones de Carlsberg. “En 2015 volverá a ser Rusia el factor de peso en las acciones”.
El interés corto de Carlsberg subió a 4,7016 de las acciones de flotación libre de la compañía el 6 de enero, 11 veces el nivel registrado hace menos de medio años, según datos que recopilaron Markit y Bloomberg.
Los datos se remontan sólo hasta mayo, y en ningún otro momento de ese período el interés en corto contra la compañía fue mayor.
La cerveza Carlsberg genera alrededor de un tercio de sus ganancias en Rusia, país que constituye su mejor mercado.