FILADELFIA — Jayson Tatum anotó 27 puntos, Jaylen Brown tuvo 23 y Boston arruinó la coronación de MVP de Joel Embiid, al vencer a Filadelfia 114-102 el viernes por la noche para tomar una ventaja de 2-1 en la serie de semifinales de la Conferencia Este.

El cuarto juego es el domingo en Filadelfia.

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Williams no anotó un punto en 23 minutos, pero su dureza al quitarse la zapatilla en la nuca simbolizó la forma en que Boston ha seguido luchando después de la vergüenza del Juego 1.

“Pensé, ‘Diablos, realmente me pisotearon’”, dijo Williams. Definitivamente me entendió bastante mal. Pero luego creo que sintió que aterrizó en algo, así que levantó el pie. Duele un poco.»

Embiid anotó 30 puntos y 13 rebotes en su segundo juego tras recuperarse de un esguince en la rodilla derecha después de recibir su trofeo de Jugador Más Valioso en una ceremonia previa al juego.

Boston les dio a los fanáticos de los 76ers pocas razones para aplaudir nuevamente.

Los Sixers se acercaron a cinco con un triple de De’Anthony Melton para que la multitud volviera al juego durante 20 segundos antes de que Malcolm Brogdon respondiera con un triple para darle a Boston una ventaja de 100-92. Al Horford aplastó a los Sixers nuevamente, como lo ha hecho la mayor parte de su carrera, cuando enterró un triple para una ventaja de siete puntos.

Embiid, obligado a tratar de ganarlo solo sin ninguna ayuda ofensiva seria, falló un lanzamiento de 18 pies y Tatum drenó un tiro en salto que casi acabó con el juego. Tatum conectó un triple más por si acaso y los Celtics ganaron su segundo consecutivo.

“Simplemente retuvimos el balón demasiado tiempo, demasiado”, dijo Embiid. “No comenzamos nuestras acciones lo suficientemente rápido. Por eso parece tan lento. No estamos anotando la pelota. No estamos haciendo tiros”.

Embiid estaba flanqueado por sus padres y compañeros de equipo cuando recibió el trofeo de Jugador Más Valioso de manos del comisionado de la NBA, Adam Silver, antes del Juego 3. Los fanáticos de los Sixers rugieron cuando Embiid levantó el trofeo por encima de su cabeza. Entonces el momento se volvió conmovedor. El hijo pequeño de Embiid, Arthur, corrió a la cancha y se echó a los brazos de su padre.

Embiid sostuvo a su hijo, que vestía una camiseta que decía “Mi papá es el MVP”, y se secó las lágrimas de los ojos mientras los fanáticos coreaban “¡MVP! ¡MVP!”

“Honestamente, él es la razón principal por la que realmente estoy aquí”, dijo Embiid. “Convertirme en padre realmente cambió toda mi vida. Solo quería mostrarle un buen ejemplo”.

Los buenos tiempos no duraron mucho.

Boston aumentó cualquier remanente emocional de la ceremonia y se apresuró a una rápida ventaja de 10 puntos.

Los Sixers pasaron el resto del juego poniéndose al día. Toda la energía gastada para regresar y tomar breves ventajas se evaporó rápidamente y los Celtics los atraparon de inmediato.

Embiid trató valientemente de llevar a los Sixers sobre una buena rodilla, pero casi no recibió ayuda de Harden y Tyrese Maxey. El esfuerzo de 45 puntos de Harden en la sorpresa del Juego 1 en Boston parecía más una aberración que una señal de lo que vendría. Harden siguió su 2 de 14 en una derrota del Juego 2 con 3 de 14 tiros para 16 puntos.

Los 5 de 28 tiros de Harden en los últimos dos juegos son los peores para él en cualquier lapso de dos juegos en su carrera, temporada regular o playoffs, en los que ha intentado al menos 20 goles de campo.

“Estamos tratando de hacerlo trabajar tanto como podamos”, dijo el entrenador de los Celtics, Joe Mazzulla. “Tratando de mantenerlo fuera de la línea de tiros libres. Los muchachos solo están trabajando para eliminar esos detalles”.

Harden no pudo levantar a los Sixers en el tercero, cuando podría haber cambiado el juego.

Sí golpeó a PJ Tucker para un triple que llevó a los Sixers a 74-72. Harden luego falló dos tiros en salto seguidos y le cometió una falta a Brown en una bandeja dura. Brown convirtió el tiro libre y los Celtics estaban arriba por ocho.

Harden extrañamente dejó pasar muchas jugadas fáciles y bandejas y también cometió cinco pérdidas de balón.

Embiid había anotado 53 puntos contra los Celtics en un enfrentamiento de principios de abril, pero nunca pudo cocinar en el Juego 3. Los Celtics hicieron doble equipo con Embiid desde el salto y parecía gastado al final del tercero. Sin un compañero de equipo en el que pudiera confiar para hacer tiros, Embiid asumió la carga de anotar y anotó 12 puntos en el tercero cuando jugó todo el cuarto.

“No recibí lo suficiente el balón”, dijo Embiid. “No para marcar, sino también para hacer jugadas para mis compañeros. Tenían una tendencia a duplicarse bastante esta noche, así que pensé que podríamos haberlo usado a nuestro favor. Cuando lo hicimos, también fallamos muchos triples abiertos”.