Por Anabel Cáceres

Santo Domingo.-Adoran al mismo Dios y reconocen a Jesús como su hijo, pero católicos y evangélicos tienen diferentes interpretaciones de la Biblia, y uno de los temas sobre los cuales difieren es la Navidad, que gran parte de los países occidentales celebra el 25 de diciembre.

El sacerdote Luís Obispo Días Méndez, de la parroquia Corpus Cristi, sostiene que la Navidad empieza la noche del 24 de diciembre y culmina el 25, es decir, al otro día.

Sin embargo, aclaró que luego de el nacimiento del niño Jesús, se celebran otras fiestas pero que no son parte de la Navidad. El religioso ser refiere a las llamadas «octavas navideñas» que son: San Esteban, el primer mártir, día 26; San Juan, el discípulo a quien Jesús más amaba día 27; Santos Inocentes, día 28; Sagrada Familia, domingo siguiente a Navidad; Santa María, Madre de Dios, 1 de enero; Adoración de los Magos, Epifanía, 6 de enero; Y el Bautismo de Nuestro Señor, domingo siguiente a Epifanía.

Sostiene que la Navidad es tiempo de gozo, alegría, es celebrar el nacimiento del niño Jesús que trae cosas nuevas, amor, esperanza y unión.

Teodocio Peña Alcalá, pastor del Ministerio de el Concilio de Iglesias de Cristo Misionera, sostiene que la navidad culmina el día 6 de enero, pero «para los que tenemos a Cristo en nuestro corazón, siempre es navidad» resaltó.

Peña define navidad como una celebración simbólica, «no es cierto que Jesús nace todos los años ese día, pero celebramos dicho evento en su honor, con el propósito de unir, amar y restaurar los vínculos de las familias y la sociedad».

Agregó que en este tiempo se puede inyectar fé en aquellos que no creen en Jesús como el hijo de Dios altísimo, que vino a dar vida.

Expresó que muchas personas no saben cuándo empieza o termina la navidad, piensan «desde que llega diciembre es navidad y a mitad de enero quito los bombillitos.»

Señaló que hay  personas que  no están instruidas acerca del verdadero sentido  de estas fiestas, y solo se enfocan en la comida, bebida, las parrandas y los regalos, no recuerdan para nada que Cristo es el centro, origen y propósito de dichas fiestas.

La psicóloga Evelyn García, define la Navidad como un tiempo de compartir, reflexionar, dar y recibir, hacer un análisis de tu vida, evaluar tus metas y objetivos y ver cómo puedes mejorar cada día.

García explica que después de hacer una autoevaluación de sí mismo, entonces las personas comienzan a notar las cosas que han perdido, las que han ganado, metas incumplidas y otras en camino, y ahí es donde viene la nostalgia.

Explicó que esta época es la más sensible del año y los sentimentalismos son evidentes, en muchos casos estos sentimientos encontrados son ahogados en alcohol, desahogados en violencia, desaguados en lágrimas, depositados en Dios o disfrazados de falsa alegría.

Para Yinet Tineo, de once años, la Navidad es el tiempo de salir de vacaciones, ir al campo y recibir regalos el día de reyes.

María Teresa Tineo, ama de casa y madre de Yinet, dice que la navidad es para recibir el Espíritu Santo, ir a la misa, reunirse en familia y compartir.

Al ser cuestionada acerca de cuándo termina la Navidad?

«En enero», respondió la señora.