Santo Domingo.–Para dar inicio a la Semana Santa y conmemorar la entrada triunfal de Jesús de Nazaret en Jerusalén, miles de devotos católicos celebraron ayer con procesiones, cánticos y misas en diversos sectores del país el Domingo de Ramos.
Con un llamado a la prudencia y a recordar que esta semana es para reflexionar sobre el sacrificio de Jesucristo por la humanidad y no para ir a las playas o los centros de diversión, los sacerdotes fray Kelvin Acevedo, de la parroquia Las Mercedes, y el padre Nelson Clark, cura párroco de la Catedral Primada de América, concluyeron sus homilías.
“¿Cómo un cristiano agradecido del amor de Dios se va a ir a la playa? Les invito a reflexionar sobre el sacrificio de Jesús y hacer de la Semana Santa un tiempo para meditar y asistir a todos las actos de la Iglesia”, dijo Clark.
Llamó a la comunidad cristiana a realizar ayuno y ofrecer sacrificios por el perdón de los pecados de sus compañeros y los suyos propios.
Mientras que Acevedo recordó que la Semana Mayor es para meditar en las casas y no en los parques de diversión e hizo un llamado a los ciudadanos para que no cometan excesos que los lleven a perder o quitar la vida a otros en accidentes de tránsito.
Los rituales
El tiempo de cuaresma inicia con el Miércoles de Cenizas y concluye con el Domingo de Ramos, período que abarca 40 días. Al día siguiente se inicia la Semana Santa.
El Domingo de Ramos conmemora la entrada triunfal de Jesucristo a Jerusalén, momento en que fue recibido con vítores y ramos.
Los católicos llevan sus palmas y ramos de laurel a bendecir y luego los colocan en las casas, donde permanece todo el año, para que de este modo esta permanezca consagrada.
La palma y el ramo de olivo se conservan, ante todo, como un testimonio de la fe en Cristo, rey mesiánico, y en su victoria pascual.
Triduo pascual
Triduo del crucificado, del sepultado y del resucitado, o Triduo pascual, inicia desde la misa vespertina del Jueves en la cena del Señor hasta la víspera del Domingo de Resurrección, donde la Iglesia celebra, “en íntima comunión con Cristo”, los grandes misterios de la redención humana.
El Jueves Santo se recuerda la instauración de sacramentos como la Eucaristía, la Confesión y el orden sacerdotal.
Ese día en la mañana se celebra la Misa Crismal, en la que los sacerdotes renuevan sus promesas, y en la tarde se recuerda “el lavatorio de los pie”.
El Viernes Santo la Iglesia celebra la crucifixión de Cristo. Se lee la pasión de cristo y se pronuncia el Sermón de las Siete Palabras de Cristo en la Cruz.
La celebración más significativa de la Semana Santa es la vigilia de resurrección, que se celebra entre el sábado y el domingo.
Programación de la semana
La Semana Mayor continuará a partir del Jueves Santo con la celebración de una misa a las 9:00 a. m. en la Arquidiócesis de Santo Domingo para la renovación de las promesas sacerdotales y la entrega de los santos a los Arciprestes.
Ese mismo día también se celebrará una misa conmemorativa de la Cena del Señor, que incluirá un lavatorio de pies, procesión por el monumento y adoración desde las 8:00 p. m. hasta las 12:30 de la madrugada.
El Viernes Santo continúa la adoración y visitas al Monumento, confesiones realizadas por el cardenal López Rodríguez y el Sermón de las Siete Palabras, de 1:00 a 3:00 p. m. para culminar con la Solemne Acción Litúrgica en la Pasión y Muerte del Señor.
Las festividades concluyen con la vigilia pascual del Sábado Santo a las 11:30 p. m. Una misa a las 12 del mediodía del domingo y bautizos.
