No ha valido que exista un alijo de 359 kilos de cocaína que se atribuye haber sido incautado a cinco venezolanos que hoy guardan prisión en La Romana, el proceso da muchos “tumbos” en los tribunales y en varias ocasiones los jueces han sido recusados por “sospechas legítimas”.
Siempre las audiencias son accidentadas, como ocurrió ayer con el pedido de que otro tribunal fuera de La Romana ventile la revisión de la libertad que les impuso una jueza ahora suspendida a favor de los cinco extranjeros.
Toda inocencia o culpabilidad debe confirmarse en los debates en las instancias judiciales, con pruebas.
