Santo Domingo.–El director ejecutivo de Casa Abierta, Juan Raddamés de la Rosa Hidalgo, denunció ayer que existe corrupción y lucha de poder entre las autoridades por el manejo de los bienes incautados y confiscados a los traficantes de drogas ilegales.
Una muestra de esa situación, dijo, es la frecuente creación de oficinas y departamentos con funciones que duplican las de los existentes, y fomenta la competencia entre los estamentos que se debaten el control de esos bienes.
“La sociedad espera y merece respuestas de sus autoridades frente a un problema que crece desmesuradamente, y no el feo espectáculo de las riñas por los bienes incautados y confiscados, cual botín de guerra al que todos parecen tener derecho y reclaman su parte”, expresó.
De la Rosa dijo que entidades como Casa Abierta reclaman que el producto de esas incautaciones no continúe repartiéndose como si se tratara de un botín de guerra, en beneficio de particulares.