SANTO DOMINGO. – El Canciller Andrés Navarro afirmó este martes que la nueva Ley 630-16 que regirá las funciones del Ministerio de Relaciones Exteriores permitirá al organismo abocarse al acelerado proceso de transformación de las prioridades y métodos que exhibe la diplomacia mundial de este tiempo, con sólidas adecuaciones, mayor fortaleza para la coordinación y la negociación en los temas inherentes a la institución, un más amplio carácter integracionista por sus propias acciones transversales, y mayor fortaleza para la coordinación y la negociación.
Al destacar los trascendentales alcances de la pieza, en un acto celebrado en el Salón Verde de la Cancillería, el canciller Andrés Navarro expuso que la ley, impulsada por el presidente Danilo Medina en el marco de la revolucionaria y exitosa política exterior puesta en marcha desde hace cerca de dos años, tiene entre sus ejes centrales el desarrollo institucional, el irrestricto apego al respeto de los derechos humanos, la permanente formación y capacitación del personal diplomático y consular, activa y coherente defensa de la soberanía nacional y una acción programática que coloque al país en el merecido sitial en el contexto internacional.
Navarro, acompañado de los presidentes de las comisiones de Relaciones Exteriores del Senado y de la Cámara de Diputados, el senador por Samaná, Prim Pujals, y el diputado por Santiago, Víctor Suárez, respectivamente, resaltó que esta nueva pieza legislativa ha asumido las importantes experiencias alcanzadas durante el dilatado proceso de aplicación de la ahora desaparecida Ley 314 del 6 de julio de 1964, en lo que respecta a asuntos medulares como las relaciones bilaterales y multilaterales, la carrera diplomática y consular, la atención a dominicanos en el exterior, entre otros.
Señaló que la iniciativa envuelve aspectos de tanta trascendencia para el futuro de la nación como impulsar la cooperación y la solidaridad internacionales como principios para el logro de los objetivos de desarrollo sostenible, paz y seguridad, así como propiciar el manejo racional de los recursos naturales y del medio ambiente, en consonancia con los intereses nacionales, entre otros aspectos de trascendental importancia.
«La revolucionaria política exterior que hoy exhibe la República Dominicana, sin precedente en la historia de la nación, garantiza políticas y acciones orientadas a mejorar las condiciones de vida de los dominicanos, pues tiene a la gente como su eje central en los espacios de negociaciones bilaterales o multilaterales, en la promoción del comercio, procesos de integración y en la defensa de los derechos humanos», sostuvo.
Agregó que «en otras palabras, el país deja atrás más de 50 años de historia de ley orgánica diplomática y consular para adentrarse a la realidad multipolar de hoy, con una sólida arquitectura institucional y jurídica, mayor alcance de productividad e integralidad en las relaciones internacionales, definidas políticas sociales, culturales, económicas, ambientales y comerciales, conjugada con idóneos mecanismos de articulación interinstitucionales y de cooperación».
Indicó que para la efectiva aplicación de la Ley 639-16 de Relaciones Exteriores, será necesario el establecimiento de varios reglamentos, tales como: El de aplicación general de la ley; el de carrera diplomática; el del Instituto de Dominicanos en el Exterior; el del Consejo Nacional de Fronteras; el de la Dirección General de Pasaportes; el de Negociaciones Comerciales y Cooperación Internacional no Reembolsable; entre otros instrumentos.