El estado de la Florida se ha convertido en el centro de la pandemia de Covid-19 en Estados Unidos, lo que ha obligado a sus autoridades a tomar medidas extremas para evitar que se siga propagando, pero hasta ahora no se han obtenido los resultados deseados.

Esa situación que impera, en Miami, sede de los Marlins, ha originado que por lo menos 17 jugadores hayan dado positivo al Covid, y no podrán jugar hasta el próximo domingo.
Ante esa penosa situación, ningún equipo quiere enfrentar a los miamenses, por temor a ser contagiado.

El comisionado de Grandes Ligas Rob Mandred ha minimizado lo ocurrido, bajo el alegato de que no hay de qué preocuparse, sin embargo, el doctor Anthony Fauci, máximo experto en enfermedades infecciosas de Estados Unidos, llama la atención de que esto pone en peligro la temporada de béisbol, que apenas tiene seis días de iniciada.

La situación es tan delicada que ayer los jugadores de los Nacionales de Washington, por votación mayoritaria, se pronunciaron en contra de viajar a Miami para la serie de tres juegos contra los Marlins, este fin de semana.

Grandes Ligas debe evitar por todos los medios que el Covid-19 afecte a más jugadores, porque ante una situación así, no hay duda que se tendría que tomar la triste y penosa decisión de suspender la campaña de 2020.