Dajabón, República Dominicana . Casi desiertas, así se encuentran las calles cercanas al Mercado Binacional de Dajabón, en un día en que normalmente estas se encuentran repletas de vendedores y compradores tanto de Haití como de República Dominicana.
En los alrededores se puede observar los motoconchos y camiones tapados con algunos productos, mientras más arriba se siguen agrupando los haitianos que retornarán a su país natal a las 12:00 del mediodía.
Las puertas de este mercado se encuentran cerradas desde hace semanas, mientras que ahora solo se permite la entrada de 10 en 10 a los comerciantes para sacar sus mercancías.
En un día normal de mercado, Kathy Cuevas, se levanta a las 4:00 de la mañana para abrir su cafetería, sin embargo, desde el cierre de la frontera ordenado por el presidente Luis Abinader, se mantiene «en vacaciones indefinidas, pero sin dinero», bromeó la mujer.
Bancas, negocios de comida y tiendas, que están fuera del mercado mantienen sus puertas abiertas, aunque aclaran que las ventas han disminuido considerablemente, pues los haitianos que cruzaban la frontera son consumidores clave.
El cierre total de la frontera terrestre, marítima y aérea inició el pasado viernes, en busca de detener la construcción de un canal de riego para desviar el agua del río Masacre.