SANTO DOMINGO.-Entre los indicadores para medir la calidad del aire figuran la presencia de monóxido de carbono que emanan de los vehículos de motor, las partículas finas dispersadas por industrias y carreteras, el polen de las plantas, así como el polvo de Sahara que actualmente pulula en el país y la región.
Estos elementos son evaluados para determinar el impacto que generan esos en la salud de las personas cuando se exponen de manera permanente en puntos específicos e inhalan de forma directa esos contaminantes.
A propósito de la celebración ayer del Día Internacional del Aire Limpio por un cielo azul: “Aire saludable, planeta saludable”, la Organización de Naciones Unidas hace hincapié en aspectos relacionados con la salud de la contaminación atmosférica, sobre todo en lo que se refiere a la pandemia de la Covid-19.
José Andrés Rodríguez, encargado del Departamento la Calidad del Aire del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, pone de relieve que de forma cíclica esta entidad realiza diagnósticos para analizar los efectos de la contaminación en la ciudanía, en coordinación con Salud Pública.
“Hemos presentado estudios sobre la Carbixihemoglobina que cuando llega a la sangre desplaza el oxígeno produciendo un efecto dañino en las personas, especialmente como agentes de tránsito, vendedores de periódicos y frutas en las esquinas de la ciudad reciben el impacto directo del monóxido”, comentó Rodríguez.
El experto en el tema define el aire como el más valioso de los recursos naturales renovables, compuesto por mezcla de gases que constituye la atmósfera terrestre cuya composición está conformada por nitrógeno al 78 por ciento, oxígeno al 21%, Argón 0.96%, dióxido de carbono 0.04%, vapor de agua y trazas de otros elementos, avala la vida de los seres vivos.
Las principales fuentes de contaminación son los vehículos que proporcionan alrededor 75 por ciento de monóxido, seguido por las industrias con un 35% de aportes, como también los fuegos forestales, la quema de basura a cielo abierto, y el uso de combustibles de mala calidad de los vehículos pesados que contienen entre 5 y 7 mil (PPM) Partículas por Millón sobre metros cúbicos de contaminantes.
Niveles exposición
Para José Andrés Rodríguez tener un aire limpio significa contar con una salud ambiental diáfana que garantice la calidad de vida a las personas.
De ahí, la necesidad de contar con un aire que cumpla las normativas medioambientales en el país, basado en las normas de la Organización Mundial de la Salud.
“Los niveles de exposición o concentración normal son los que la gente puede respirar y que no ataque a su organismo. Las partículados o partículas finas son las más contaminantes en áreas urbanas donde hay más vehículos y en hogares rurales donde se cuecen alimentos con carbón, ya que pueden producir cáncer al penetrar los arveoles”, detalló Rodríguez
Políticas
Rodríguez recomienda la importación de combustibles de calidad, e impulsar la verificación de los catalizadores de los vehículos, como además y dar mantenimientos a las calderas industriales, para reducir la contaminación.
Alto riesgo
—1— Monóxido
Aumentan la presión arterial, provoca arritmia cardiaca y sueño.
—2— Particulados
Contienen metales pesados, que van directos a los alveolos de pulmones.
—3— Reconversión
Rodríguez insta a mejorar la calidad de los combustibles.