Las compañías ferroviarias tienen dificultades para responder a la creciente demanda estadounidense de camiones y SUVs, lo que frustra a Ford Motor Co. y Toyota Motor Corp. y lleva a Warren Buffett a incrementar las inversiones en su división de trenes.
La escasez de vagones es particularmente aguda en el caso de los de dos pisos con suficiente espacio para cargar camiones más altos y SUVs apilados.
BNSF Railway Co., propiedad de la compañía de Buffett Berkshire Hathaway Inc., comprará casi 1,900 este año, más que el total de unidades de dos y tres niveles adquiridas en los últimos dos años.
Los estadounidenses compraron 7,2 millones de camiones y SUVs en 2014.